viernes, 14 de junio de 2013

Lidia Papaleo declaró en Tribunales

Ante el juez federal Julián Ercolini, la viuda de David Graiver aportó información en la causa que investiga delitos de lesa humanidad en el traspaso accionario de la empresa Papel Prensa durante la última dictadura cívico militar. Osvaldo Papaleo dijo: “Estamos contentos de que un juez se haga cargo de la causa".
 
Lidia y Osvaldo Papaleo
Lidia Papaleo llegó después de las 10 de la mañana a los tribunales federales de Retiro. Se trata de la primera declaración en la causa que investiga si hubo delitos de lesa humanidad en el traspaso de las acciones de la empresa Papel Prensa, luego de que el juez Ercolini se hiciera cargo.
 
Su hermano Osvaldo Papaleo, estuvo presente y manifestó: “Estamos contentos de que después de dos años y medio, hay un juez se haga cargo de la causa y que empieza a indagar”.
 
“Lo que estamos discutiendo es la colaboración civil con beneficio económico para apoderarse de una empresa base, estratégica”, explicó sobre el camino que lleva la causa.
 
“El Grupo Clarín, La Nazión y La Razón nunca pagaron la transferencia de acciones a los Graiver, ni tampoco el estado nacional, ni tampoco le depositaron en ningún sitio”, recordó el hermano de la primer testigo que declara para el juez Ercolini.
 
Osvaldo Papaleo también puso de manifiesto el delito de lesa humanidad que se investiga: “Haber presionado a los Graiver y haberle sacado una empresa por la fuerza, a parte del precio vil, en las circunstancias en que ellos estaban detenidos y condenados por un consejo de guerra”.
 
Tanto la viuda de Graiver como la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación son querellantes en la causa. Desde diciembre de 2012, se solicitaron las declaraciones indagatorias de Ernestina Herrera de Noble, Héctor Magnetto, Bartolomé Mitre, Sergio Peralta Ramos, Marcos Peralta Ramos y Hugo Peralta Ramos.
 
Los miembros de la familia Graiver denunciaron secuestros y torturas en el marco de la venta accionaria de Papel Prensa a los diarios Clarín, La Nazión y La Razón.

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