Según sondeos, hay candidatos que no alcanzan el piso mínimo fijado por el Frente para integrar la lista en octubre. Si se cruzan datos de intención de voto en Capital, sólo la dupla Pino Solanas - Elisa Carrió lograría sumar el piso del 22% exigido por la carta orgánica. Lousteau, en el límite.
¿Qué pasaría con el frente porteño UNEN si las listas definitivas fueran sólo las de la dupla Fernando Pino Solanas - Elisa Carrió? ¿Y si el único dirigente de las otras corrientes internas que ingresara en la nómina fuese el ex ministro de economía Martín Lousteau?
Estas preguntas no son un mero juego de especulaciones electorales. Son algunas de las realidades que se pueden plantear realizando el ejercicio de cruzar los datos de intención de voto en Capital Federal, de varias encuestas publicadas hasta el cierre de esta nota, con el acuerdo interno que UNEN hizo para distribuir los escaños de la lista de diputados nacionales. Ésa es la única categoría cuya nómina puede conformarse mezclando las listas de las distintas vertientes internas de un partido o frente, según la Ley de Primarias.
El tema es así: la carta orgánica de UNEN estableció un piso del 22% de los votos, dentro de los electores que opten por alguna de las listas de este frente, para poder ingresar al reparto de los lugares de la lista de diputados nacionales que se hará aplicando el sistema D’Hont, el mismo que se usa para distribuir las bancas en la Cámara Baja luego de una elección general. El punto es que a ese 22%, según la mayoría de las encuestas que han medido la intención de voto en Capital, no llegarían las cuatro listas que compiten en la interna. Hay corrientes que podrían quedarse afuera de toda participación electoral.
En la categoría de diputados nacionales, los que encabezan las nóminas de UNEN son: Carrió, por Coalición Sur, Ricardo el Gil Lavedra, por Juntos, Martín Lousteau, por Suma+; y Leandro Illia, por Presidente Illia. (Este último precandidato –hijo del ex presidente– no aparece en las mediciones que se han conocido hasta ahora).
Yendo a los números, el último sondeo de la Consultora de Estudios e Intervenciones Sociales (CEIS), indica que, sumados los tres candidatos medidos de UNEN, se llevarían un 28% de los votos en Capital. Y dividirían así: 18 puntos para Carrió, 6 para Lousteau; 4 para el Gil Lavedra. Si se aplica el piso del 22% acordado dentro de la coalición, sólo quien saque el 6,16% en la general cumpliría con el requisito. Es decir, basados en las cifras de CEIS, el Gil Lavedra y su corriente Juntos quedarían fuera de la lista, Lousteau tendría chances de entrar arañando y Carrió se llevaría más de dos tercios de los escaños.
El horizonte que plantea la última encuesta publicada de la consultora Poliarquía es relativamente similar, no en sus números pero sí en la tendencia y, por ende, en los efectos políticos en la interna de UNEN. Ese sondeo –ciertamente optimista sobre el peso de la coalición– indica que todos los precandidatos sumados llegarían al 35% de los votos en Capital. Veinte puntos serían de Carrió, 9% de Louesteau, y 6,6% del Gil Lavedra. En este caso, el radical rebasa el 6%, pero al crecer el total de votos que recibiría el frente tampoco llega al 22% exigido por la carta orgánica de la coalición, ya que para eso tendría que sacar más del 7,7 por ciento. Lousteau, en cambio, entraría con más comodidad que en el escenario planteado por las cifras de CEIS.
El resultado de estas Primarias de UNEN tendrá un efecto en la elección de legisladores porteños. La Ciudad de Buenos Aires no tiene ley de primarias y el modo de resolver el armado de la lista de legisladores que encontró la coalición fue que se aplicaran en esa nómina, que debe presentarse en septiembre, los porcentajes que cada corriente interna saque en la primaria de diputados nacionales.
El piso para ingresar sería el mismo, 22 por ciento. De todos modos, al no haber una ley en el distrito, este acuerdo interno, según dos fuentes de UNEN, podría ser cambiado para "curar las heridas" que parece que dejará la disputa por los cargos nacionales.
Respecto de los candidatos para el Senado Nacional, la Ley Electoral establece que quien salga primero se lleva la lista completa. En este caso, la mayoría de los sondeos indican que Fernando Pino Solanas encabeza la intención de voto, mientras Rodolfo Terragno y Alfonso Prat el Gay disputan el segundo puesto.
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