El gobernador de la Provincia aseguró que solo va "a buscar romper con las injusticias, las cocinas del paco y la inseguridad", al tiempo que ratificó su "vocación de servicio" y aclaró que no piensa romper con Nación. Además les pidió a los docentes "discutir salarios pero con los chicos en las aulas".
El gobernador bonaerense, Daniel Scioli, aseguró ayer que solo va "a buscar romper con las injusticias, las cocinas del paco y la inseguridad", al tiempo que ratificó su "vocación de servicio".
El manco del espanto advirtió que "la gestión es el camino" y aclaró que no pensaba romper relaciones con el gobierno nacional. "Había mucha expectativa con mi presencia hoy aquí", sostuvo Scioli al inaugurar una comisaría en la ciudad de Tandil con el intendente Miguel Lunghi.
Por otro lado, el gobernador volvió a reclamar a los docentes que discutan la situación salarial "pero con los chicos en las aulas".
Cristina Kirchner se mostró muy enojada durante el acto que compartió el jueves con Scioli y el intendente Martín Insaurralde, quien ya suena como candidato a legislador en octubre. Criticó al mandatario, a quien tenía a apenas unos metros, por el manejo de la seguridad, por no defenderla frente a las críticas, por "no poner la cara" durante la inundación en La Plata, por contar con protección mediática y por "quedar bien con todos".
"Siempre es más fácil y más cómodo decir palabras de ocasión, siempre es mucho más fácil y más cómodo quedar bien con todos" y "tener un millón de amigos", señaló la presidenta con ironía, aunque sin identificar a los destinatarios de sus críticas. Al hablar de las responsabilidades que le tocan a cada nivel de gobierno, puso como ejemplo la tragedia que ocurrió el 2 de abril en La Plata: "cuando tuvimos la desgracia de La Plata no se me ocurrió hacerme la estúpida como hacen otros que nunca ponen la cara, yo me hice cargo aunque no era mi responsabilidad", dijo mientras el gobernador desviaba la mirada.
En otro de los pasajes más duros de su discurso, Cristina se preguntó: "A mí me llama mucho la atención que siempre haya dirigentes intocados, a los que los grandes medios corporativos nunca los tocan, ¿por qué les pegan a unos y no a los otros?"
El único que rompió el silencio en el entorno del gobernador fue su hermano, José Scioli. El dirigente denarcovaísta puso en duda que los dichos de la presidenta sobre "dirigentes que no ponen la cara" hayan estado dirigidos al gobernador, al sostener que él siempre "estuvo con ella".
Por su parte, el intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, devolvió a Cristina los halagos que ella le prodigó durante la visita a su distrito. "Vi una presidenta enérgica y apasionada, que trabaja incansablemente por el destino de los 40 millones de argentinos", dijo y sobre las críticas destacó que "la presidenta ponga blanco sobre negro, sin ningún temor" porque, acotó, "es un gesto que revaloriza a la política".
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