lunes, 3 de junio de 2013

El oficialismo empieza a definir el perfil de los candidatos en los distritos clave

Por Martín Piqué, para Tiempo Argentino

La Presidenta dio señales en Lomas de Zamora y comenzó a reacomodar el Gabinete en función de sus objetivos electorales. El territorio bonaerense volverá a ser el eje del armado kirchnerista. Ya se mencionan algunos nombres, como el del lomense Martín Insaurralde y el ministro Florencio Randazzo. Córdoba y Santa Fe, con nombre de mujer.


Cuando faltan diez días para el vencimiento del plazo para formalizar alianzas, y a 20 días del límite impuesto por la justicia para inscribir candidatos, el kirchnerismo comienza a definir sus armados electorales para la Ciudad Autónoma y las provincias de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba. La consigna que recorre las filas del FPV, al mismo tiempo que circulan nombres para encabezar las listas, es cumplir con el llamado al compromiso planteado por la presidenta. 

"Valoro a los compañeros que defienden el proyecto político. Cuídense de esos a los que parece ser que nada les toca, nada les llega y todo está bien", fue una de las frases más comentadas del acto en Lomas de Zamora. 

¿Qué significa esa advertencia, esa invitación a asumir riesgos, cuando llega el momento de elegir candidatos? En la respuesta a ese interrogante está la lógica que adoptará Cristina Fernández en esta coyuntura electoral: quienes se consideren parte del proyecto, tengan atributos valorados por la sociedad y no especulen serán privilegiados a la hora de seleccionar los nombres.

La semana que pasó fue todo un indicador de la proximidad del cierre de listas. El tono del discurso de la presidenta derivó en interpretaciones de todo tipo. La más extendida es que los destinatarios de su pedido de mayor compromiso fueron el gobernador Daniel Scioli y, en menor medida, el intendente de Tigre, Sergio Massa. Pero también se leyó el discurso como un mensaje para todos los dirigentes y funcionarios con altas responsabilidades dentro del oficialismo. Una de las formas de demostrar ese compromiso, por ejemplo, es ser candidato en una elección más difícil que la de 2011, que no tendrá el nombre de la jefa de Estado al frente de la boleta. Estas reflexiones sobrevuelan, por estas horas, la definición de los hombres y mujeres que encabezarán las listas del FPV en cuatro de los distritos electorales más poblados del país. 

En la provincia de Buenos Aires volverá a dirimirse –como sucede cada dos años– la "madre de todas las batallas". En la Casa Rosada son conscientes de la importancia de la votación en un distrito al que –por si fuera poco– pertenecen tres de los hombres que alimentan las expectativas de buena parte del poder económico: el peronista disidente Francisco De Narcováez y los ya citados Scioli y Massa. En Balcarce 50 conocen los vínculos indirectos entre De Narcováez y Scioli, sobre todo a partir de la agrupación La Juan Domingo. El kirchnerismo también viene siguiendo los movimientos de Massa, con quien mantiene algunos puentes de negociación. 

Con la cuenta regresiva acercándose al 22 de junio (fecha límite de inscripción de candidaturas), en la Casa Rosada están evaluando una batería de nombres de peso (en conocimiento público o inserción territorial) para hacer frente al incierto panorama bonaerense: se trata de los ministros Alicia Kirchner (Desarrollo Social) y Florencio Randazzo (Interior y Transporte) más los intendentes Martín Insaurralde (Lomas de Zamora) y Fernando Espinoza (La Matanza). Versiones de último momento deslizan que la hermana de Néstor y cuñada de la presidenta finalmente no sería candidata. Una cuestión reglamentaria podría complicar su incorporación a una lista legislativa: su nombre no figura en el padrón de electores y su domicilio registrado en el RENAPER no está ubicado en provincia de Buenos Aires. Sin embargo, la Cámara Nacional Electoral extendió hasta el 13 de junio el plazo para actualizar los cambios de domicilio. 

En el caso de Randazzo, que acaba de anunciar la compra de nuevos vagones para renovar las formaciones del Roca, sus allegados no descartan un destino electoral. "Florencio es un hombre del proyecto y está claro de qué lado está. Nunca especuló. Hoy tiene un desafío muy importante, que es mejorar el transporte público. En cualquier caso, la decisión de que sea candidato o no, corre por cuenta de la presidenta", comentaron desde el entorno del ministro, un hombre de Chivilcoy y con bastante ascendencia en el Interior de la provincia.

A la hora de seleccionar candidatos para el distrito bonaerense, no se descarta que el oficialismo sume otras figuras, algunas a las que se les vence el mandato, como la actual jefa del bloque en Diputados Juliana Di Tullio, o incluso el todoterreno Diego Bossio, titular del ANSES y hombre fuerte en Tandil. 

En los otros tres distritos del país, la definición de los nombres parece estar más avanzada y responde a un criterio lógico: buscar los candidatos que potencien al FPV en distritos tradicionalmente esquivos. En Córdoba podría encabezar la actual rectora de la Universidad Nacional de la provincia, Carolina Scotto, con llegada a la presidenta. 

Otra mujer será, indudablemente, la primera candidata en Santa Fe: se trata de María Eugenia Bielsa, quien renunció a su banca de diputada provincial para impedir una postulación de Agustín Rossi. Bielsa estuvo el miércoles pasado en la Casa Rosada. Por último, en la Ciudad de Buenos Aires la definición de las listas está entre tres nombres pero quien más posibilidades tiene es el senador Daniel Filmus: su capital político siguen siendo las encuestas, que le asignan un piso digno de votos y conocimiento entre los porteños.

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