El ministro de Planificación Federal resaltó además que se pavimentaron 4.200 kilómetros de rutas. "La inversión en infraestructura vial es una de nuestras prioridades de este modelo industrial con inclusión", aseguró.
"Desde 2003, el Gobierno Nacional triplicó los kilómetros de la red de autopistas y pavimentó 4.200 kilómetros de rutas nacionales de ripio y tierra porque la inversión en infraestructura vial es una de nuestras prioridades de este modelo industrial con inclusión", aseguró el ministro en un comunicado.
De esta manera, el funcionario salió al cruce de un artículo publicado ayer en La Nazión, titulado "Las rutas argentinas, un obstáculo para exportar", en el que se analiza la supuesta falta de planes de infraestructura vial en relación al crecimiento del parque automotor y las exportaciones.
El ministro desmintió que sólo se construyan 29 kilómetros de autopistas por año, como señala el artículo, y destacó que en promedio se concluyeron 130 kilómetros durante los últimos años.
Dijo que esto puede verse "en los 1.800 kilómetros terminados desde 2003, con los que la red pasó de menos de 1.000 a 2.798 kilómetros en todo el país, mientras que otros 721 kilómetros están en ejecución. De esta manera la red de autopistas contará con más 3.500 kilómetros en 2015 y estamos proyectando otros 2.000 kilómetros en los planes quinquenales de obras públicas que estamos elaborando con las provincias".
Entre las obras terminadas, el ministro enfatizó que "incluyeron algunas autopistas largamente esperadas, como la que une Córdoba y Rosario, de la que sólo se habían construido unos pocos kilómetros en el 2003, o la Autovía Ruta Nacional 14, de la que restan pocos kilómetros, que va del sur de Entre Ríos hasta el paso fronterizo de Paso de los Libres en Corrientes, de la que no encontramos ni un solo papel de cómo debía hacerse, a pesar de que era llamada la 'ruta de la muerte' y su conversión en autovía, reclamada como una obra estratégica para el Mercosur".
"También se terminaron o se construyen tramos de autopistas en prácticamente todas las provincias, por lo que de ninguna manera existen obras postergadas, como dice el diario", remarcó.
En ese sentido, explicó que "en muchos lugares las autopistas no se construyen de manera lineal, sino que se comienza por los tramos de mayor tránsito en los accesos a los pueblos" por lo que "en todas las rutas que menciona el diario hay por lo menos alguna obra en ejecución".
Asimismo, el ministro destacó que "se pavimentaron 4.200 kilómetros de caminos de ripio, llevando la red nacional pavimentada de 31.000 a más de 35.000 kilómetros, además de realizar en todas las rutas tareas de reparación y mantenimiento".
De tal manera que "impactó favorablemente en la producción de la región pampeana y promovió la producción en provincias del interior profundo como Formosa, Chaco, Misiones, Corrientes, Entre Ríos, Tucumán, Salta, Jujuy, La Rioja, San Juan, Santa Cruz y Río Negro".
"Estas obras fueron posibles por la decisión política de invertir en infraestructura vial, pasando de un presupuesto de 260 millones en 2003 a más de 14.000 en 2012, lo que totaliza una inversión de más de 90.000 millones de pesos en la última década", detalló.
Por otra parte, De Vido consideró que "más allá de la falta de rigor que tiene el planteo del diario La Nación, no coincidimos con esa concepción de país agroexportador, en la que aumentar el parque de 5 a 12 millones de vehículos en 10 años es visto como un problema, sino que por el contrario promovemos un modelo industrial, en el que el mercado interno tiene un rol preponderante".
"Nos enorgullece que millones de argentinos puedan acceder a un auto porque eso quiere decir que mejora la calidad de vida y porque se impulsa así un sector que demanda empleo y genera valor", agregó.
Por último, el ministro señaló que "lo que verdaderamente molesta es que se construya la red vial en todo el país, generando nuevas posibilidades de desarrollo en zonas alejadas como la Patagonia o el Norte Grande, y no sólo en la Pampa Húmeda".
"Nuestras políticas tienen por objetivo la inclusión social y la corrección de asimetrías para la igualdad de oportunidades en todo el territorio y no sólo satisfacer los intereses del complejo agroexportador", concluyó De Vido.
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