LA INFANTERÍA REPIMIÓ AYER POR LA TARDE A LOS TRABAJADORES DEL
SINDICATO DE OBREROS Y EMPLEADOS DEL AZÚCAR DEL INGENIO LEDESMA (SOEAIL), QUE
MANTENÍAN UN PARO GENERAL POR DECIMOQUINTO DÍA CONSECUTIVO EN LA PLANTA DE LA
FAMILIA BLAQUIER.
Durante el día los trabajadores alertaron respecto del operativo de la Policía de Jujuy sobre la ruta 34 en la localidad de Libertador General San Martín, donde realizabann un corte total para forzar la apertura de negociaciones en reclamo de mejores condiciones de trabajo y una suba salarial. Por la tarde, balas de goma y gases fueron lanzados contra los manifestantes,
Los trabajadores permanecían desde hacer varios días en la ruta 34, con carpas instaladas a la altura del puente San Lorenzo. La protesta había comenzando con volanteadas, pero finalmente decidieron el corte. Por eso, ayer a la mañana se encontraron con un fuerte operativo policial y denunciaron un inminente represión.
El SOEAIL, encabezado por Rafael Vargas, ratificó la medida de fuerza en una masiva asamblea realizada el lunes pasado, que se cerró con una masiva movilización por la ciudad, que partió de la iglesia San Francisco para finalizar en la puerta del ingenio de la familia Blaquier.
La movilización fue acompañada por los trabajadores de Ledesma de las plantas de otras localidades como Calilegua, Caimancito, El Talar y Vinalito; otros sindicatos, familias, partidos políticos.
Las familias de los trabajadores permanecían hasta ayer frente a la planta de la empresa de los Blaquier, mientras los obreros sostenían el corte de la ruta 34 a la espera de que el régimen fascista de Gerardo Morales decida abrir una mesa de negociación.
"Al frente de la empresa Ledesma, hay niños, hay mujeres, y estamos dispuestos a estar acá hasta la última consecuencias. A los changos, les decimos fuerza", describió una de las mujeres que permanecía en el acampe en la ciudad de Libertador San Martín.
Las mujeres pidieron la solidaridad de otras familias de trabajadores, les pidieron que "no tengan miedo", que salgan por el "reclamo de un sueldo justo".
"Queremos decirle a la empresa Ledesma que no le tenemos miedo", insistió una de ellas en diálogo con una radio local. Otra de mujeres hizo un nuevo llamado a la unidad y recordó que con la pelea de los trabajadores luego se benefician también "ingenieros y capataces"; y pidió al régimen y a la empresa que no ordene una represión sobre la ruta 34. "Que no se olvide Blaquier lo que pasó aquel día del triángulo, cuando hubo tres muertos", advirtió en referencia a la represión ocurrida en 2011 durante una protesta anterior sobre terrenos de la empresa Ledesma.
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