Supo meterse en la vida privada de los famosos alegando "cuestiones periodísticas" pero ahora, que se cree un showman, no quiere hablar de su vida privada. Declaraciones que lo asocian a la noche y la separación de su mujer después de 17 años.
Luis Ventura destapó la olla y Jorge Lanada enfureció.
El chirolita de Jorge Rial dijo que el periodista insignia del Grupo Clarín solía concurrir al boliche Tequila jueves y sábados donde buscaba compañía de una sola noche y que, incluso, poseía un inmueble alquilado solo para eso.
Paralelamente se conoció que su mujer, Sara Stewart Brown, le pidió que deje la vivienda que ambos compartían. 17 años duró este matrimonio que tiene una hija en común de 8 años y que al parecer no sobrevivió a la exposición del principal vocero del multimedio de Magnetto.
"No soy un actor, de mi vida privada no hablo", lanzó a la prensa el capocómico estrella del Grupo Clarín, quien no asume que su nuevo rol de showman tiene esta consecuencia. "No tengo nada para decir", tiró de nuevo quien confirmó que no habla de su intimidad pero si de la ajena.
Los programas de espectáculos se hicieron eco de esta información e incluso le recordaron que no tuvo problema años atrás en cuestionar la sexualidad de Sandra Mihanovich o Julio Bocca, ni tampoco de hablar de las salidas nocturnas de Alejandro Fantino.
Ahora Jorgito está en problemas, aparecieron los archivos que lo señalan de VIP en VIP, en Mar del Plata y ya van varias figuras del espectáculo a las cuales se lo vincula.
El precio de la fama, que le dicen.
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