domingo, 28 de julio de 2013

“Cambió el Estado ausente por uno comprometido con los más humildes", afirmó Cristina

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner aseguró ayer que en la última década “se logró revertir un modelo de Estado totalmente ausente a uno absolutamente comprometido con los más humildes y con los que producen”.
 
 
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner afirmó ayer que en la última década “se logró revertir un modelo de Estado totalmente ausente a uno absolutamente comprometido con los más humildes y con los que producen”, al encabezar la inauguración de plantas de tratamiento cloacales que beneficiarán a mas medio millón de bonaerenses.
 
Junto al intendente de Lomas de Zamora y primer candidato a diputado, Martín Insaurralde, el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, el ministro de Planificación Julio de Vido, el titular de AySA, Carlos Ben, y el sindicalista José Lingieri, Cristina inauguró la ampliación de la planta Depuradora Norte de AySA, y otras tres en Tres de Febrero, Campana y El Jagüel.
 
En su discurso, Cristina contrapuso las políticas privatizadoras de la década del noventa con las estatizaciones realizadas desde el 2003 cuando asumió Néstor Kirchner y pidió a la población que la apoyen porque "sin mayorías en las cámaras" del Congreso no se pueden aprobar estas iniciativas que permitieron revertir "este Estado ausente".
 
En ese marco, Cristina reivindicó además de la estatización de AySA, "la recuperación de Aerolíneas Argentinas que permite la conexión" en todo el país, la estatización de los fondos jubilatorios, que "logró revertir un modelo de Estado totalmente ausente a uno absolutamente comprometido con los más humildes y de los que producen".
 
"Lo importante es saber por qué te llegan las cosas, que no llegan mágicamente”, advirtió Cristina, en la sede de la planta que estuvo colmada por los vecinos y militantes políticos del norte del conurbano bonaerense, donde estas obras beneficiarán a miles de personas que no tienen acceso al servicio de agua potable.
 
En su mensaje, Cristina enfatizó: “Yo no soy eterna y quiero que se les grabe que el trabajo que cada uno ha logrado tampoco es eterno. Que los beneficios sociales que tienen no son eternos, que lo que se consiguió tampoco lo es, después de 10 años de tener trabajo y convenciones colectivas”.
 
La jefa de Estado señaló que "la cloaca no se ve pero sirve para mejorar la calidad de vida, la mortalidad infantil, el medio ambiente, pero no solo para que los no tienen agua potable, sino para los 40 millones de argentinos".
 
"En tres meses estamos terminando las plantas de tratamiento de residuos cloacales", agregó y señaló que "llevamos invertido en AySA en conurbano y la ciudad, más de 15 mil millones de pesos en agua potable y cloacas".
 
En ese sentido, Cristina agregó que "tenemos que acordarnos que no solo somos Buenos Aires", señaló que el miércoles se inauguró una planta de tratamiento cloacas en las termas de Río Hondo y que en todo el país "llevamos invertidos en agua y cloacas más de 33 mil millones".
 
Cristina recordó que fue "Néstor Kirchner el hombre que tuvo la decisión de rescindir la privatización de los servicios de agua potable", que había sido privatizado en los '90 durante el gobierno del turco innombrable.
 
En ese sentido, la jefa de Estado recordó que "nos criticaban mucho que hayamos recuperado AySA, y no se daban cuenta, no porque sean más malos, sino porque los que tienen que informar, te ocultan todo para que sigas creyendo que en realidad los gobiernos populistas son muy malos y que lo mejor sería volver a la década de los '90. Si pudieran volverían a la época en que se quedaron con Papel Prensa".
 
"Todos tienen derecho a tener representantes en las listas de todas las décadas, pero nuestros representantes son todos de la década ganada", agregó.
 
En esa línea de pensamiento, Cristina advirtió que "cuando vienen esos modelos de estado que algunos quieren restablecer, con los primeros que empiezan es con los que están más abajo" y recordó que esas privatizaciones "no se hicieron en dictaduras militares, fue en plena democracia".
 
En ese marco, Cristina pidió "memoria no para mirar para atrás, memoria para mirar con mayor claridad el presente y el futuro, para que el futuro sea mucho mejor y les hablo con esta crudeza que me da la militancia de tantos años y la responsabilidad que siento porque le prometí a él cuando se fue, me iba a romper el alma para que por lo que él se había matado siguiera adelante".
 
En el último tramo, la jefa de Estado afirmó que "les pido que me apoyen para hacer estas cosas, si no hubiéramos tenido el número suficiente en las cámaras, no hubiésemos podido hacer las cosas que hicimos con AySA".
 
"Por eso solamente les pido eso, ayudarme a mí no es ayudar a Cristina, es ayudarse a ustedes, a sus hijos y a las generaciones que van a vivir y merecen seguir teniendo un país en el que la patria volvió a tener sentido", apuntó, al concluir su discurso.
 

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