EL MINISTRO DE TRANSPORTE, GUILLERMO DIETRICH, ASEGURÓ AYERS QUE LA RENUNCIA DE LA HASTA EL MIÉRCOLES TITULAR DE AEROLÍNEAS ARGENTINAS, ISELA CONSTANTINI, FUE "DE COMÚN ACUERDO"; DESTACÓ QUE EL EQUIPO QUE SE CONFORMÓ EN LA LÍNEA AÉREA DE BANDERA CONTINUARÁ, Y CONSIDERÓ QUE HUBO UN "MUY BUEN AÑO" EN LA ADMINISTRACIÓN DE LA FUNCIONARIA SALIENTE.
"La realidad es que esto fue de común acuerdo con Isela, fue un muy buen año, y el equipo que ella juntó en su gran mayoría continúa, son gente profesional, sin fijación partidaria, que agarraron una empresa en una muy mala situación", destacó.
El ministro mencionó que el régimen macrifascista tiene una "restricción presupuestaria grande y debe cumplir con el presupuesto" y, en ese sentido remarcó que, "cerrar el presupuesto de Aerolíneas no fue fácil, como no lo fue en ninguna otra empresa, como sucedió en el Belgrano Cargas".
Respecto del reemplazante de Costantini, Mario Dell'Acqua, Dietrich destacó en declaraciones a la oficialista radio Mitre la trayectoria del funcionario, quien asumió Intercargo, empresa que brinda servicios de tierra a Aerolíneas, por pedido del propio jefe de la cartera.
Finalmente, hizo un balance de las gestiones anteriores de Aerolíneas. "El déficit promedio del Gobierno anterior fue de 670 millones de dólares por año. Con esa plata comprabas LATAM y te quedaba plata; este año la primera reunión, el número daba 1.000 millones de dólares, de lo que necesitaba Aerolíneas del Estado para funcionar, entre otras cosas porque Mariano Recalde dejó montones de cosas sin pagar", recordó.
Por último, Dietrich reseñó que durante la gestión camporista "no había presupuestos ni balances: Austral no tenía desde 2008 y Aerolíneas no había cerrado el de 2014, no había cierres mensuales, había 160 cajas y finamente llegamos a 300".
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