LOS SUPERMERCADOS DE ROSARIO DEBERÁN PAGAR EN TOTAL MÁS DE $ 400.000 POR ABRIR SUS LOCALES EL DOMINGO CUANDO UNA NUEVA LEY SE LOS PROHIBÍA.
El gobierno de Santa Fe impuso multas de $ 340.000 y $ 68.000 a dos grandes cadenas de supermercados que abrieron al público el domingo, violando la ley provincial de Descanso Dominical que esta semana comenzó a regir en Rosario.
El ministro de Trabajo de la Provincia, Julio Genesini, aseguró que "el próximo domingo se volverá a fiscalizar y se abrirán nuevos sumarios" en caso de que se repita la situación de antes de ayer. "Tenemos que entender que no hay una potestad inmediata de clausura sino en caso de reincidencia, que establece la propia normativa, allí se puede proceder a la clausura del local", explicó el ministro en relación con las sanciones impuestas.
De esta forma, la empresa Coto que el domingo abrió sus cinco locales rosarinos deberá pagar una sanción de $ 340.000. A la par, Jumbo, que solo cuenta con un espacio en el shopping Alto Rosario, fue reprendida con $ 68.000, informaron fuentes de la cartera laboral santafesina.
El secretario de Fiscalización del ministerio, Fernando Muruaga, dijo a la prensa que "el monto de la multa que establece la ley de Descanso Dominical (13.441) es el equivalente de diez salarios mínimos vital y móviles, que es de $ 6.810. Es decir, que por cada local las firmas que abrieron deberán pagar $ 68.100". El funcionario advirtió que, "en caso de reincidencia, a la tercera vez se puede aplicar una clausura por diez días consecutivos".
Por su parte, Genesini afirmó que el gobierno llevará a cabo "todos los pasos legales, se van a hacer las constataciones, los sumarios correspondientes" y dijo esperar que "haya un cambio de actitud por parte de las empresas" que por la extensión de sus locales, de acuerdo con la ley, deben cerrar los domingos. La ley de Descanso Dominical fue aprobada en diciembre de 2014 por la Legislatura de Santa Fe por una iniciativa de la Asociación de Empleados de Comercio de Rosario.
El Concejo Municipal rosarino adhirió en marzo pasado a la norma, pero esta fue rechazada por las empresas, que dicen que cerrar un día a la semana les causará grandes pérdidas. La normativa establece que los supermercados, hipermercados y megamercados con superficies superiores a los 1.200 metros cuadrados no podrán abrir los domingos.
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