LA CANTIDAD AFECTADOS POR LAS INUNDACIONES EN SIETE PROVINCIAS COMENZÓ A DESCENDER A RAÍZ DE LA ESTABILIDAD DE LOS RÍOS, PERO EL PRONÓSTICO DE ABUNDANTE CAÍDA DE AGUA DE ENTRE 50 Y 100 MILÍMETROS PARA LOS PRÓXIMOS DÍAS COMPLICA LA SITUACIÓN EN ENTRE RÍOS Y EL SUR DE SANTA FE.
La cantidad de personas afectadas por las inundaciones en siete provincias comenzó a descender a raíz de la estabilidad de los ríos, pero el pronóstico de abundante caída de agua de entre 50 y 100 milímetros para los próximos días complica la situación en Entre Ríos y el sur de Santa Fe, donde un tramo de la costanera de la localidad de San Lorenzo se derrumbó.
Las precipitaciones no dan tregua en sectores de las provincias de Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes y Córdoba, mientras que en Chaco y Formosa, en donde hay cerca de 10.000 afectados, los pobladores están alejados de sus hogares desde hace cuatro meses por los altos niveles de los ríos Paraguay y Paraná.
Otra localidad muy perjudicada por las lluvias es Pozo del Molle, en el sur de la provincia de Córdoba, en donde a las copiosas lluvias se sumó el agua proveniente de los canales clandestinos de riego que causan que muchas casas se vean anegadas y lo que motivó que el intendente Carlos Selvático graficara la situación con la expresión "el pueblo se hunde".
La Subsecretaría de Protección Civil y Emergencias de la Nación destacó que en las provincias de Entre Ríos, Santa Fe, Corrientes, Chaco, Formosa, Córdoba y Santiago del Estero hay afectadas 12.109 personas y 9.543 evacuados, lo que representa un descenso respecto de días pasados donde la cantidad de perjudicados por las precipitaciones superaba las 15.000.
Entre Ríos, que llegó a tener 12.000 personas afectadas a raíz de que en una semana llovió la misma cantidad de agua que habitualmente se registra en medio año en la zona, presentaba hoy 8.109 personas en esa condición y 695 evacuados y autoevacuados.
La ciudad entrerriana más afectada es Villa Paranacito, con 6.800 personas en esa condición, mientras que en Concordia hay 1.100 evacuados por la crecida de los ríos.
Pese a la mejora, el director del organismo, Oscar Duarte, anticipó que "nuevamente el viernes y sábado próximos hay posibilidad de nuevas tormentas" y reveló que la actual situación climática "seguirá al menos hasta junio y quizás incluso hasta julio".
"En lo que resta de abril, parte de mayo e inicios de junio, van a seguir estos fenómenos de lluvias importantes", adelantó el técnico, aunque reconoció que el fenómeno de El Niño "ha pasado de fuerte a moderado y va a ir descendiendo cada vez más, hasta pasar a una etapa neutral llamada 'La Niña' en junio o julio".
En Santa Fe, lo que más preocupa a las autoridades es la crecida en desarrollo del río Salado, que alcanzó su pico en la baja cuenca con un registro de 6,80 metros, mientras que los valores se mantendrán elevados por el aporte de lluvias locales.
El nuevo pico de crecida del Salado ya produce anegamientos en barrios de las ciudades de Recreo, Santo Tomé y Santa Fe situados fuera de los anillos de protección.
La provincia tiene 1.636 evacuados y autoevacuados y las localidades más afectadas son Las Toscas, Romang, Reconquista, San Javier, Santa Rosa de Cachines, Santa Fe, Santo Tomé, Arocena y Providencia, entre otras.
Además de la crecida del Salado, la provincia sufrió el colapso y derrumbe de un sector del paseo central de la Costanera en la localidad de San Lorenzo, provocando sólo daños materiales.
En tanto, en el Chaco hay 5.034 personas entre evacuados y autoevacuados que siguen soportando niveles altos del río Paraná. Las autoridades aseguran que en su mayoría son pobladores ribereños a quienes es muy difícil remover de su lugar de residencia, mientras que las localidades más afectadas son Barranqueras, Puerto Vilelas, Isla del cerrito y Colonia Benítez.
En Corrientes hay 770 personas evacuadas y autoevacuadas y 4.000 afectadas, siendo los pueblos de Esquina, Pueblo Libertador, Monte Caseros y Sauce los más perjudicados por el fenómeno climático.
En Formosa, el río Paraguay tiene estables los niveles en Puerto Pilcomayo y Formosa pero aún por encima de las alturas de evacuación, por lo que aun hay 5000 personas afectadas y fuera de sus hogares, mientras que en Córdoba, además de la situación particular de Pozo del Molle, las autoridades hídricas realizan un seguimiento por la apertura de válvulas de los diques La Quebrada y San Roque, aunque la situación se mantiene normal y no hay afectados.
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