El ex juez español expresó su reconocimiento a la gestión iniciada por Néstor Kirchner y continuada por Cristina Fernández de Kirchner porque "toma como política de Estado la verdad, la justicia y la reparación de los derechos de las víctimas" de crímenes de lesa humanidad.
Garzón, titular del Consejo de Administración del Centro Internacional para la Promoción de los Derechos Humanos, presidió ayer la apertura del XIX Congreso del Consejo Federal de Derechos Humanos en la ciudad entrerriana de Paraná.
"Estoy orgulloso de estar en Argentina, donde las políticas de Derechos Humanos han sido grandes, están siendo importantes, y van a ser trascendentes en el futuro", destacó Garzón en el salón de conferencias del Hotel Maran Suites & Towers de Paraná.
Junto a Garzón se encontraban el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Martín Fresneda; el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, y la intendenta Blanca Osuna, entre otros funcionarios.
Garzón afirmó en la conferencia que la responsabilidad en materia de derechos humanos "es de todos" y recordó "la obligación con los más jóvenes y viejos para que esta lucha no se pierda".
El ex magistrado español sostuvo que "es un orgullo, no sólo por convicción" sino porque es su obligación "como juez defender a aquellos que sufrieron abusos y en eso la nacionalidad no tiene importancia".
"La civilización ha conseguido avanzar para que la garantía plasmada en la Declaracion Universal de Derechos Humanos, la dignidad humana, el trabajo, la justicia, y la libertad realmente sean una realidad", señaló Garzón.
Además, indicó que el que "dice que las políticas de derechos humanos son de segunda categoría, no tiene el derecho a representar a ciudadanos, porque está quebrantando la regla básica de la democracia, que es la defensa de los derechos humanitarios de los ciudadanos".
Finalmente, agradeció al gobernador Urribarri, y manifestó su "gran admiración" por Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner, porque "esta fuerza de derechos humanos en Argentina no existía, vengo a defender esta política de este país, porque toman como política de estado la verdad, la justicia y la reparación de derechos de las víctimas de crímenes de lesa humanidad".
Por su parte, Urribarri, dijo que la presencia de Garzón y de Fresneda "son un gesto a los entrerrianos que padecieron el terror de la tortura física y mental".
"La memoria está llegando a las escuelas, a los chicos, a los docentes, lo que es bueno para el futuro de la Argentina, porque la memoria, verdad y justicia son bases de la construcción de un país en el que el límite moral es la violación a los derechos humanos", aseveró Urribarri.
En tanto, Fresneda señaló que Argentina "viene atravesando momentos difíciles porque venimos transformándola, y cuando se mueven las viejas estructuras conservadoras que fueron para pocos, para distribuir las riquezas, se entra en una crisis".
"El polo judicial no está alejado de esto, por lo que es muy interesante que podamos analizar las condiciones en que se encuentra el país para generar puntos de crítica, y mejorar y reconocer los avances que se están realizando", remarcó.
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