El Diputado del Frente Rejuntador irrumpió en un evento donde presentaban el auto de Pechito López con custodios armados y en un tono muy violento. Un papelón.
Todo ocurrió en la ciudad de General Rodríguez, a unos cincuenta kilómetros de la Capital Federal. Allí se juntó una parte importante de la prensa que cubre automovilismo para un momento agradable.
En la previa de la fecha que este fin de semana correrá el Mundial de Turismo, en Termas de Río Hondo, Santiago del Estero, la empresa Citroen realizó un evento de promoción con el auto que maneja José María "Pechito" López, figura y cómodo líder del campeonato del WTCC, junto a ex pilotos de Fórmula 1 y reconocidos en el mundo.
Pero cuando algunos esperaban para subirse al auto del cordobés a dar una vuelta irrumpió Felipe Solá. Sí, el Diputado del Frente Rejuntador, que casualmente vive al lado del predio donde se llevaba a cabo el evento. Con dos custodios, uno de ellos armado con una escopeta, comenzó a gritar en busca del responsable del evento.
A los gritos y con una actitud por demás violenta cruzó su auto particular en la pista, para impedir que continúe girando el auto que gana todos los fines de semanas carreras en Europa, debido a que causaba ruidos molestos.
Con dichos como “yo voy a cortar esto porque está prohibido”, no escuchó los argumentos que le daban las autoridades argentina de la casa francesa el auto y finalmente cruzó su vehículo y cortó las pruebas.
De acuerdo al portal Autoblog.com.ar -que registró el video del incidente-, Solá se quejó porque, según él, el circuito está habilitado para autos clásicos y no de competición y se exaltó ante los periodistas a quienes les dijo “yo tengo más bolas que ustedes y por eso hago lo que quiero”.
El diario La Nazión, en su sitio web, agregó además que el diputado nacional se quejó porque con el nivel de ruido que había en la muestra sus yeguas no iban a poder dormir y por consecuente no iban a poder “entrar en celo”.
De acuerdo al portal Autoblog.com.ar -que registró el video del incidente-, Solá se quejó porque, según él, el circuito está habilitado para autos clásicos y no de competición y se exaltó ante los periodistas a quienes les dijo “yo tengo más bolas que ustedes y por eso hago lo que quiero”.
El diario La Nazión, en su sitio web, agregó además que el diputado nacional se quejó porque con el nivel de ruido que había en la muestra sus yeguas no iban a poder dormir y por consecuente no iban a poder “entrar en celo”.
Como aquella famosa película que protagonizó Michael Douglas, Felipe Solá tuvo su día de furia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario