La Legislatura porteña rechazó reducir los sueldos de sus integrantes

El proyecto que pretendía hacer que los legisladores cobraran exactamente lo mismo que los docentes fue rechazado por la legislatura porteña.

Un proyecto de ley que proponía que "las dietas de los legisladores de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se equiparen al promedio resultante del salario de un director de escuela del distrito, de jornada completa y el salario de un jefe o jefa de servicio de los hospitales públicos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires" fue rechazado ayer por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires. La iniciativa fue propuesta por  Gustavo Vera y Pablo Bergel del partido Bien Común.

“Tenemos que encontrar algún término medio y dar un gesto de sinceridad pública”, había dicho Vera para promover su iniciativa. Sin embargo fue reprendido por realizar viajes a Roma. “No voy a hacerme eco de las chicanas baratas porque todos los meses publico mi recibo de sueldo, asi también como mi boletos de viaje a Roma”, aclaró ayer en la sesión.

Pablo Bergel, en tanto, manifestándose a favor de su compañero de banca dijo que “este proyecto no modifica el salarios de los trabajadores de la Casa, de planta permanente, sino que establece eliminar el 20 por ciento adicional del sueldo de los legisladores” y agregó que “tampoco planteamos un salario indigno”.

Aníbal Ibarra por su parte calificó al debate como un disparate. Desde el PRO, José Luis Acevedo expresó su rechazo a la iniciativa, señalando que "yo soy un laburante político, militante y me indigna tener que ir con mi recibo de sueldo para demostrar que no gano 80 mil pesos como publicaron estos días en los medios", explicó con relación a una nota publicada en Infobae y La Nazión.

"Esto es un desgaste, quieren debilitar al parlamento", dijo Acevedo y agregó que "yo hago política para que todos ganen bien". 

Por último la jefa del bloque del PRO, Carmen Polledo, expresó su malestar: "estoy cansada de que un grupo de iluminados nos diga quienes son los buenos y quienes los malos. Yo no creo que la condición económica determine si somos sensibles o no ante los problemas".