jueves, 14 de febrero de 2013

En el Vaticano no saben qué hacer con los objetos papales

Mientras los Cardenales marcan como inaudita la situación, expertos aún no están seguros del destino del anillo, aunque sostienen que todos los elementos del Papa deben ser destruidos.
 
Una nueva polémica se presentó en torno a la renuncia del pecho frío del Papa.
 
El anillo del Pescador que lleva Benedicto XVI y que simboliza el poder pontificio parece que será destruido luego del 28 de febrero, el día de la renuncia papal, pero los expertos aún no están seguros.
 
Una de las dudas es que el anillo se quema luego de la muerte del Papa en actividad y en este caso no hay muerte alguna.
 
Federico Lombardi, portavoz del Vaticano, calificó a la situación como inédita pero sostuvo que los objetos utilizados por el Papa deben ser destruidos aunque dejó abierta la incógnita sobre el anillo.
 
Con la incineración del anillo comienza el rito para elegir al santo padre y es en ese caso cuando su destrucción cobra protagonismo.
 
Luego, un funcionario de la corte papal tiene como primer labor romper el anillo con un martillo y de este modo evitar falsificaciones.
 
No sabemos si cagarnos de risa ante tantas pelotudeces o si indignarnos ante el desprecio de la ¿Santa? Iglesia Católica por los millones de personas en el mundo que sufre hambre y desamparo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario