Editorial - Por Alberto Carlos Bustos (*)
COMO DECÍA EL AMIGO PANIGASSI EN GASOLEROS, "UNA COSA ES UNA COSA Y OTRA COSA ES OTRA COSA". UNA COSA ES EL VOTANTE DE DERECHA Y OTRA COSA ES EL GLOBULODO. PERO YO NO DISCUTO CON NINGUNO DE LOS DOS.
Con vos, que votaste a Macri porque sos de derecha, está todo bien; te
respeto. Sos mi enemigo (en términos ideológicos), pero te respeto como tal. Y
respeto tu coherencia: sos de derecha; tenías que votar a Macri. Y ni que
hablar de vos, que un día, antes de las elecciones (de las generales, no del
balotaje) me dijiste “yo sé que Macri es un pelotudo impresentable, pero yo soy
de derecha y Macri es la única alternativa de derecha con posibilidades de
triunfo”. ¿Cómo no te voy a entender? Votaste a Macri tapándote la nariz, del
mismo modo que muchos de nosotros votamos a Scioli tapándonos la nariz.
Es problema es con vos… Sí, sí… con vos… Globoludo laburante de clase
media, media baja y hasta baja, que lo votaste porque querías un cambio, porque
estabas cansado de “la yegua”, de la dictadura k y de la cadena nacional. Con
vos que lo votaste porque te encanta esa “onda macanuda” de llamarse todos por
el nombre de pila, que ni siquiera es hija de la natural relación de confianza
entre las personas sino de la indicación de Durán Barba. Con vos que lo votaste
por esa estúpida cuestión aspiracional de creer que porque los votaste a ellos sos
como ellos, sin darte cuenta que jamás vas a ser como ellos, porque la “gente
como uno” no permite que se le mezcle la chusma. Con vos… ¡¡¡CON VOS ESTÁ TODO
MAL!!!
Estabas harto de la corrupción y votaste a Macri, que tiene 4
procesamientos sobre el lomo, por delitos que van desde el contrabando agravado
hasta el montaje de una red paraestatal de espionaje de opositores. Te asqueaba
tanto la corrupción k que cambiaste a Lázaro Báez y a Cristóbal López por “Nicky”
Caputo y por Ángelo Calcaterra; a Jaime por Grindetti y al hotel de El Calafate
por las offshore de Panamá y Bahamas.
Estabas harto del despilfarro del Estado y votaste a Macri, que forma
parte un grupo empresario familiar al que el Estado le pagó su deuda externa,
cuando Cavallo estatizó la deuda externa privada durante la última dictadura
cívico militar.
Estabas harto de la dictadura K y votaste a Macri, que nombra jueces de
la Corte Suprema y deroga leyes por Decretos de Necesidad y Urgencia y que
persigue a laburantes por cuestiones ideológicas.
Estabas harto de la falta de libertad de expresión y de la libertad de
prensa, pero mientras vos podés seguir viendo y escuchando (COMO LO PUDISTE
HACER SIEMPRE) a Lanata, a Nelson Castrolo, a Longobardi, a Majul, a Morales
Solá y a toda la caterva de periodistas militantes de la derecha reaccionaria y
conservadora; yo no puedo ver ni 6-7-8 ni TVR, ni puedo escuchar a Luciano
Galende, a Nora Veiras, a Carlos Barragán o a Edgardo Mocca en la radio.
Estabas harto de que el gobierno favoreciera a los “negros de mierda”, estrato
social al cual vos creés no pertenecer; y ahora tenés un gobierno que favorece
a los empresarios poderosos y a los agroterranientes, los verdaderos dueños de
este país, estrato social al que en tu puta vida vas a pertenecer.
Estabas harto de la inseguridad y de los delitos y resulta que ahora
aumentaron. La diferencia es que Clarín ya no lo publica o lo publica en la
página 65 y TN ya no te pasa durante todo el día el robo de un maxiquiosco.
Estabas harto de la cadena nacional de “la yegua”, pero te fumaste en
pipa la cadena nacional del enano mediopolvo Marijuan haciendo pocitos en media
Patagonia, para encontrar un bolso con rastros de tierra.
Estabas harto de “la falta de diálogo y de consenso” y votaste a Macri,
que se la pasa hablando del diálogo y del consenso, pero antes de que el
Congreso empiece a debatir una ley, ya avisa que la va a vetar; lo que no
sorprende, teniendo en cuenta que como jefe de Gobierno porteño vetó más de 170
leyes, muchas de ellas votadas, e incluso algunas presentadas, por sus propios
legisladores.
En fin… Vos y yo sabemos que podría seguir hasta pasado mañana con los “estabas
harto de…”, pero esto se haría demasiado largo y creo que ya quedó claro que te
vendieron un buzón y lo compraste.
Con vos, el del principio de estas líneas, que votaste a Macri porque
sos de derecha, no discuto, porque nuestras diferencias no son políticas; son
ideológicas. Y las diferencias ideológicas son insalvables, lo que hace que
cualquier discusión al respecto sea al pedo, sin sentido.
Y con vos, que lo votaste porque “estabas harto de…” tampoco discuto,
porque yo, como me enseño mamá, no discuto con boludos.
(*) Director y editor responsable de Currín
Muy bien expuesta la postura, muy explicativa, me encantó.
ResponderEliminarMuy bien expuesta la postura, muy explicativa, me encantó.
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