La iniciativa apunta a regularizar la situación de morosos que se encuentran en bases de datos privadas, aun habiendo saldado la deuda. "Es para corregir injusticias", dijo el diputado Ariel Basteiro. Podrían desaparecer las empresas que brindan este servicio.
En el Congreso avanza un proyecto de ley para eliminar de los registros de morosidad a las personas que ya hayan cancelado sus deudas bancarias, comerciales o financieras, o además que posean moras por sumas de hasta 10.000 pesos.
Según argumentan los autores del proyecto, aquellas personas que se encuentran incluidas en bases de datos como Veraz, Equifax o Nosis, entre otras, figuran en las mismas al menos durante dos años más luego de cancelada la deuda, algo que les impide, por ejemplo, tomar nuevos créditos.
“Lo que se plantea no es darle un perdón al moroso y que no pague sus impuestos, el tema es que eso no lo ponga en un plano de injusticia”, explicó el diputado de Nuevo Encuentro Ariel Basteiro, autor de uno de los proyectos.
Según los especialistas que trataron el tema en la Comisión de Asuntos Constitucionales, en la actualidad más de un tercio de la población económicamente activa esta imposibilitada de tomar créditos por encontrarse incluida en este tipo de registros.
En ese sentido, Basteiro remarcó que “cuando caés en el Veraz, por más que posteriormente pagues, te mantienen como persona no confiable por 2 o 4 años y lo que se busca es regularizar esta situación. Que te demores con un impuesto no significa que no seas solvente”.
El dictamen plantea la “eliminación de registros de morosidad incluidos en bases de datos que proveen informes comerciales a todas las personas físicas o jurídicas que a la fecha de entrada en vigencia de la norma tengan canceladas o regularizadas sus deudas bancarias, comerciales o financieras”.
“No hay marco legal que autorice esta práctica -sostuvo el diputado-, es una decisión arbitraria de esos registros. En su momento, a fines de la década del 90, en un país con inestabilidad financiera, eran tenidos en cuenta. Hoy no tiene sentido”.
Además, Basteiro graficó la injusticia que se genera con contribuyentes que deben montos ínfimos y figuran en los registros: “Hay gente que figura en el Veraz por deber una factura de un celular”.
Otro de los puntos incluidos en el proyecto es establecer la gratuidad de estos informes, lo cual terminaría con el negocio de las empresas privadas que se dedican a eso y hoy cobran al menos entre 40 y 50 pesos por el servicio.
“No debería existir el informe privado. Es un negocio único en el mundo, un invento argentino, de alguno que se avivó a fines de los 90”, sentenció Basteiro, y agregó que “el oficial es el de la AFIP. No hay organismo más idóneo y con mayor nivel de información, de ingresos y egresos de los contribuyentes. Los propios bancos consultan a AFIP, los que utilizan Veraz para buscar antecedentes son inmobiliarias o particulares”.
Más allá de detalles y pormenores que iremos conociendo a medida que avance el tratamiento del proyecto, desde Currín On Line apoyamos decididamente la inciativa de Basteiro.
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