EL MINISTRO DE PRODUCCIÓN ADVIRTIÓ AYER QUE SI SUBEN LOS PRECIOS SE ABRIRÁN LAS IMPORTACIONES.
Tres días después de anunciar junto con el secretario de Comercio, Miguel Braun, el programa “precios transparentes”, y augurar una baja de los precios al contando, el ministro de Producción, Francisco Cabrera, advirtió que si la medida provoca una suba de precios abrirán más las importaciones para “fomentar la competencia”.
El régimen macrifascista mediante una resolución dispuso que a partir del 1º de febrero se deberán exhibir el precio al contado de los productos y su costo en cuotas, con la expectativa de que se reduzcan los precios en un pago, pero Cabrera reconoció ayer, como lo hizo Braun el día posterior al anuncio, que el deseo del Ejecutivo es sólo algo probable e inclusive que podría haber una remarcación generalizada de precios antes de la entrada en vigencia del programa.
Frente a esa posibilidad, el ministro señaló que en caso de que se verificaran eventuales nuevos aumentos una de las tres herramientas para forzar una baja, "a corto plazo y la más efectiva", es la apertura de las importaciones. En segunda instancia, indicó, también puede actuar la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia, que puede "controlar los abusos de posición dominante" y activar "las leyes de protección al consumidor".
En declaraciones radiales, el titular de Producción, un día después de que el Ministerio de Trabajo dictara la conciliación obligatoria en el conflicto de la empresa de computadoras Banghó, que anunció el despido de 205 trabajadores, puso al sector de la informática como un buen ejemplo, ya que bajó un 36 por ciento sus precios tras la eliminación de los aranceles que protegían la industria local, concentrada en los últimos años en las empresas de ensamblaje de Tierra del Fuego.
Aunque el funcionario admitió que la política de abrir las importaciones “provoca algún dolor porque afecta o puede afectar el empleo argentino”, invocó "el compromiso de defender el trabajo y el Plan de Transformación Productiva", que coordina junto al titular de la cartera laboral, Jorge Triaca, anunciado como paliativo para contener los despidos en el sector informático.
"Le damos un seguro de desempleo ampliado, más del doble de lo que recibirían por el seguro común, durante nueve meses. Y a partir de ahí, a las empresas que llamamos dinámicas, que puedan absorber a esos empleados, durante seis meses le financiamos una parte del salario de los contratados y le permitimos tomar créditos de hasta 500 mil pesos por cada uno de los empleados que contraten", detalló Cabrera.
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