domingo, 24 de julio de 2016

El atacante de Munich no tendría vínculos con el Estado Islámico

LA POLICÍA INSISTE CON QUE EL ASESINO SE SUICIDÓ Y SOSPECHA QUE TODO FUE "UN TIROTEO CLÁSICO".

El jefe de la policía de Munich, Hubertus Andrä, reconoció que aún no establecieron vínculos entre grupos jihadistas y el joven de 18 años que ayer mató a 10 personas en un centro comercial, y sostuvo que en la investigación se está considerando que el hecho podría tener relación con la matanza de 77 personas que hace cinco años cometió el extremista de derecha noruego Anders Behring Breivik, en la capital Oslo, del que ayer se cumplieron cinco años.

Según Andrä, el hecho responde a los cánones de un "tiroteo clásico" y se trata de un acto violento cometido en solitario por un atacante que no tiene vínculos con la milicia Estado Islámico (EI).

Según la información oficial, las víctimas del ataque de ayer en la ciudad alemana son, en su mayoría, jóvenes: tres adolescentes de 14 años y dos de 15 años. Además, entre los asesinados se encuentran otras cuatro personas de 17, 19, 20 y 45 años. Entre los fallecidos no se encuentra ningún turista o ciudadano extranjero, precisó la policía.

Las fuerzas de seguridad creen que el atacante podría sufrir problemas psiquiátricos. El fiscal Thomas Steinkraus-Koch, que también compareció hoy ante los medios de comunicación, dijo que posiblemente sufría alguna enfermedad de tipo "depresivo".

La hipótesis que se maneja es que el autor de la masacre habría utilizado Facebook como reclamo para atraer a sus víctimas al centro comercial antes de cometer el crimen. Se está comprobando si usó un perfil falso en la red social para publicar un convite que animase a los jóvenes a ir al restaurante de comida rápida en el que se iniciaron los disparos.

"Él iba a invitarles a algo, pero a algo que no fuese muy caro. Esa era seguramente la invitación", dijo el jefe de la Oficina Federal de Investigación Criminal de Baviera, Robert Heimberger, en referencia a un mensaje publicado en Facebook en nombre de una chica del que se han hecho eco los medios alemanes y que presuntamente habría escrito el agresor.

"Vengan a las 16 horas al Meggi", rezaba el mensaje que las fuerzas de seguridad continúan analizando. Con la palabra "Meggi", el autor se habría referido al establecimiento de la cadena de comida rápida McDonalds en el que el joven abrió fuego.

El del viernes es el segundo acto violento que sacude a Alemania en menos de una semana. El lunes, un joven refugiado de 17 años atacó con un hacha y un cuchillo a los pasajeros de un tren regional que circulaba por el sur del país, dejando cinco heridos. El atacante, que había pedido asilo el pasado año, fue abatido por la policía una vez que abandonó el convoy y huyó a pie.

Por otra parte, la Policía ratificó que el joven se suicidó frente a varios agentes unas dos horas y media después del ataque. "A eso de las 20:30 horas, una patrulla de la policía de Munich entró en contacto con el presunto autor al norte del centro comercial Olympia. Cuando los agentes le hablaron, sacó un arma, se la puso en la cabeza y disparó", indicó un comunicado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario