miércoles, 25 de marzo de 2015

Cayó un avión en Francia y hay 150 muertos, entre ellos, dos argentinos

Ciento cincuenta personas murieron ayer al estrellarse un avión Airbus A320 en la zona de los Alpes franceses y equipos de rescate trabajaban para retirar lo cuerpos en una zona de muy difícil acceso situada a unos 3000 metros de altura, aunque ya se se logró recuperar una de las cajas negras para saber las causas de la tragedia. Entre los muertos hay dos argentinos.


El primer ministro de España Mariano Rajoy y la canciller alemana Angela Merkel suspendieron sus actividades en el dia de ayer para organizar lo equipos de búsqueda y poder rescatar los cuerpos entre los restos del avion de la compañía aérea de bajo costo Germanwings, una filial de la firma alemana Lufthansa.

La aeronave Germanwings, una compañía de bajo costo del grupo Lufthansa, que había partido desde el aeropuerto de El Part, de Barcelona, España, y tenía como destino final la ciudad alemana de Dusseldorf, se estrelló a unos 3000 metros de altura en la región alpina de Alta Provenza, cerca de la localidad de Barcelonnette.

Trasladaba a 144 pasajeros, en su mayoría españoles y alemanes, dos pilotos y cuatro asistentes de vuelo y los radares perdieron toda señal a las 7.39 hora argentina, (10 GMT) mientras que horas después Lufthansa confirmaba en las redes sociales el accidente y daba las cifras oficiales sobre la cantidad de víctimas.

El ministro francés del Interior, Bernard Cazeneuve, anunció que se ha encontrado una de las cajas negras del avión que será entregada a los servicios de investigación y añadió que se han tomado las disposiciones necesarias para acordonar el lugar de los hechos, según consignó la agencia EFE.

Cazeneuve precisó también que mañana llegarán a la zona especialistas y médicos forenses para que la investigación sobre lo sucedido "pueda llevarse a cabo en las mejores condiciones".

Un vocero del ministerio informó que la caja negra encontrada será analizada por expertos del organismo francés de Investigación de Accidentes (BEA).

El BEA, especializado en accidentes aeronáuticos, anunció que mañana ofrecerá una conferencia de prensa con los primeros detalles sobre el suceso, que tuvo lugar en una zona escarpada cercana al municipio de Prads-Haute-Bléone, en los Alpes franceses.

Desolados e impotentes, familiares y amigos de las ví­ctimas del avión de Germanwings se acercaban al aeropuerto de Barcelona para confirmar la muerte de sus seres queridos y recibir apoyo y consuelo en medio del dolor.

"Estoy muy afectado, lo siento", se limitó a decir Manuel Calvo, un dirigente sindical de UGT que acudió a la Terminal 2 del aeropuerto catalán para acompañar a los familiares de dos amigos y trabajadores -uno de ellos un directivo- de la compañí­a de autopartes Delphi, de Sant Cugat del Vallés, que habí­an muerto en el accidente.

La llegada de los familiares consternados y aturdidos era lenta pero casi ninguno de ellos estaba en condiciones de hablar o explicar las historias detrás de los nombres de la lista de 150 víctimas, entre ellos dos bebés, según confirmó el consejero de Interior catalán, Ramon Espadaler.

Custodiados por policí­as, los familiares caminaban entre lágrimas o al borde del llanto en dirección a la zona que las autoridades habilitaron para la atención psicológica y acompañamiento de las familias de las ví­ctimas.

Desde Alemania, el gerente de la compañí­a Gremanwings, Thomas Winkelmann, informó que en el avión viajaban 67 alemanes, aunque la cifra podrí­a cambiar.

Un grupo de 16 estudiantes y 4 profesoras que participaban de un intercambio escolar en el Instituto Giola de Llinars del Vallés, se encontrarí­an entre las ví­ctimas de nacionalidad alemana.

Las autoridades españoles indicaron que habí­a 45 "apellidos españoles" entre los pasajeros. Otras informaciones, no confirmadas oficialmente, hablan que entre las ví­ctimas habrí­a personas de nacionalidad francesa, turca, holandesa, belga y japonesa. Más tarde se confirmó que también había dos pasajeros de nacialonalidad argentina (ver aparte).

Agentes forense españoles han empezado a tomar muestras de ADN a los familiares de víctimas con el fin de poder identificar los cadáveres, informaron a EFE fuentes policiales.

Los familiares de las víctimas en Barcelona han sido trasladados a hoteles cercanos al aeropuerto donde se les ofrece asistencia médica y psicológica, así como información sobre el accidente.

"Nuestros pensamientos están ahora con todas las personas que están sufriendo ese inmenso pesar", expresó la canciller alemana Merkel durante una conferencia de prensa convocada en la sede del gobierno tras divulgarse las primeras noticias del accidente.

Merkel señaló además que mantuvo contactos telefónicos con el presidente de España, Mariano Rajoy, y su par francés, François Hollande. "Francia, España y Alemania trabajaremos juntos y nos ayudaremos en todas las formas posibles", agregó.

Por su parte, el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, suspendió todas las actividades y aseguró a través de su cuenta de Twitter que constituyó "un gabinete de crisis" para afrontar el caso.

Hay dos argentinos entre las víctimas

Dos argentinos viajaban en el fatídico vuelo de la empresa Germanwings. Así, lo confirmó secretario de la Embajada argentina en Francia, Santiago Rafael Martino.

Se trata de Gabriela Maumus, de 30 años, y su esposo Sebastián Greco, quienes perdieron la vida en el vuelo que hacia el trayecto Barcelona - Düsseldorf.

En el vuelo viajaban 144 pasajeros y seis tripulantes y no hubo sobrevivientes. ABC destacó que "la lista de pasajeros ya confirmados en el Prat por sus familiares son: 47 españoles, 2 argentinos, 1 norteamericano, 1 colombiano, 1 mexicano, 1 belga, 1 marroquí y 7 alemanes"

En tanto, dos cantantes de ópera alemanes, el barítono Oleg Bryjak y la contralto María Radner -además del marido de ésta y su bebé-, también fallecieron en el accidente del avión de la compañía Germanwings que se estrelló hoy en los Alpes franceses.

Ambos venían de interpretar la ópera "Siegfried" de Wagner en el teatro Liceo de Barcelona, según confirmó la institución en un comunicado en el que expresó su pésame por la muerte de los cantantes.

El kazajo Oleg Bryjak, quien comenzó su carrera en la ex Unión Soviética, interpretaba el papel de Alberich en esta producción, mientras la joven María Radner debutó en el coliseo barcelonés con el papel de Erda. Como señal de luto, el teatro colocó a media asta las banderas de su fachada.

En el avión viajaba también un grupo de 16 estudiantes alemanes, de entre 15 y 16 años, y 2 profesoras, que regresaban tras haber realizado un intercambio en un colegio de Llinars del Vallés, un pueblo catalán de la provincia de Barcelona.

Asimismo, entre los pasajeros había una veintena de empleados de varias empresas instaladas en Barcelona y que viajaban a Düsseldorf por motivos profesionales, como dos trabajadores de Bayer, dos de la empresa de indumentaria Desigual, dos de Fuji, de Delphi, y tres de la empresa Weismüller.

El papa Francisco envió sus condolencias a los familiares de víctimas 


El mensaje del Papa Francisco se concretó a través de una misiva enviada al obispo de Digne, Jean-Philippe Nault, en la que expresa que "se une al dolor de las familias y les manifiesta su cercanía".

Además, señala que "ora por el eterno descanso de los fallecidos, confiando en la misericordia de Dios para darles la bienvenida a su casa de paz y de luz".

El pontífice expresó en estos momentos su "cercanía a todos los afectados por esta tragedia" y también "a los equipos de rescate que están trabajando en condiciones difíciles".

"El Santo Padre pide al Señor que proporcione a todos fuerza y consuelo y que invoque sobre ellos la abundancia de las bendiciones divinas", concluyó el mensaje.

Al menos siete Airbus sufrieron accidentes en los últimos ocho años.

El avión de la empresa Germanwings que se estrelló ayer a la mañana en los Alpes franceses constituye el último accidente de aeronaves de la empresa gala Airbus, cuyo último episodio fatal sucedió en diciembre de 2014, cuando un vuelo de Air Asia se precipitó en el Mar de Java.

En ese Airbus A320-200, que volaba de Indonesia a Singapur, viajaban 162 personas a bordo y ninguna sobrevivió.

En julio de 2010, un Airbus A321 de la compañía paquistaní Airblue se estrelló cuando maniobraba para aproximarse al aeropuerto de Islamabad, en Pakistán, en medio de la lluvia y escasa visibilidad, y sus 152 pasajeros fallecieron.

Dos meses antes, 103 personas murieron cuando el Airbus A330-200 de Afriqiyah Airways se estrelló en Trípoli, capital de Libia, aunque en esta ocasión hubo un sobreviviente: un niño holandés de 9 años.

Otro niño de 12 años fue la única persona que sobrevivió a la caída del A310 de la compañía aérea yemení Yemenia, que en junio de 2009 cayó sobre el Océano Índico con 153 pasajeros a bordo, cuando se aproximaba a las islas Comoras, según recordó un despacho de la agencia DPA.

En tanto, en junio de 2009 un AF 447 de la empresa francesa Air France que volaba desde Río de Janeiro a París con 228 personas a bordo se precipitó sobre el Atlántico, sin dejar sobrevivientes.

Poco más de un año antes, el 30 de mayo de 2008, un Airbus A320 de la empresa Taca se salió de la pista de aterrizaje del aeropuerto de Tegucigalpa -capital de Honduras- y chocó con varios autos al invadir una calle.

Otro Airbus A320 brasileño, que en julio de 2007 intentaba aterrizar en el aeropuerto de San Pablo, chocó contra una estación de servicio y un edificio lindante, en un accidente en el que fallecieron las 187 personas que iban en el avión y otras 12 que estaban en tierra.

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