CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER RATIFICÓ LA DENUNCIA PARA QUE SE INVESTIGUE LA FILTRACIÓN DE ESCUCHAS TELEFÓNICAS QUE LA TUVIERON COMO PROTAGONISTA EN CONVERSACIONES CON EL EX DIRECTOR DE LA AGENCIA FEDERAL DE INTELIGENCIA (AFI), OSCAR PARRILLI.
La ex mandataria se presentó en el Juzgado Federal de Río Gallegos para ratificar en persona la presentación que había realizado el pasado jueves.
En aquella ocasión, la líder del Frente para la Victoria había considerado que la difusión de los audios había sido "una maniobra de carácter criminal", al tiempo que apuntó contra el juez federal Ariel Lijo, quien había ordenado la intervención del teléfono de Parrilli; la Corte Suprema de Justicia; e incluso contra Mugrizio Macri.
De acuerdo a su primera presentación, los hechos se enmarcan en los delitos de "violación de la privacidad", "abuso de autoridad y violación de los deberes de los funcionarios públicos", además de "malversación de caudales públicos".
En su presentación, Cristina sostuvo que desde que dejó la presidencia viene siendo blanco de "una feroz campaña de persecución política, mediática y judicial" y que el Poder Ejecutivo Nacional lleva a cabo "maniobras coordinadas y convergentes con tal estrategia, filtrando, a través de las fuerzas de seguridad y el Ministerio que las conduce, información reservada de tales actuaciones judiciales".
Pero, además, la ex jefa de Estado denunció que "de manera subrepticia" viene siendo "víctima de maniobras de seguimiento que se practican sobre todos los movimientos" que realiza, ya sea en el ámbito de Santa Cruz así como también cuando se traslada a la Ciudad de Buenos Aires.
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