EL EX MINISTRO DE PLANIFICACIÓN Y ACTUAL DIPUTADO JULIO DE VIDO CONSIDERÓ QUE ESTÁ "SIENDO SOMETIDO A UNA PERSECUCIÓN POLÍTICA DESDE EL 10 DE DICIEMBRE" Y RECHAZÓ QUE SE HAYA AMPARADO EN SUS FUEROS PARA EVITAR UN ALLANAMIENTO EN SU CASA. LO HIZO EN LA SESIÓN DE LA CÁMARA BAJA DONDE SE VOTÓ A FAVOR DE HABILITAR UN OPERATIVO JUDICIAL EN SU DOMICILIO.
Al hacer uso de la palabra, De Vido dijo que las acusaciones en su contra "son un escarnio público y una mentira" y que se someterá "a todos los procesos judiciales".
"En todo este tiempo jamás negué información. Jamás dejé de presentarme en la Justicia o de entregar la información que se me solicitó. Jamás frené un allanamiento o un pedido de requisitoria", afirmó.
Además, explicó lo ocurrido durante un operativo en su casa. "Buscaban información de un contador que jamás vivió en mi domicilio. Ese operativo era para buscar información sobre una sociedad comercial, no sobre mi persona. Era mi domicilio y no el de la sociedad comercial, y tampoco había información que buscaban", señaló e indicó que fue el propio juez de la causa quien determinó suspender el allanamiento.
Antes de ingresar a la sesión, De Vido dijo estar "consternado" con el escándalo de corrupción protagonizado por el ex secretario de Obras Públicas José López.
"Estoy muy consternado con lo que pasó, mi profunda condena por lo que pasó", destacó ante la prensa que lo esperaba en el Congreso.
Sobre la situación de López, que era su subordinado en la cartera de Planificación, subrayó que no es "juez para juzgar a nadie", si bien insistió en repudiar lo sucedido. En este marco, negó considerar a López como su "mano derecha" y atribuyó esa caracterización a versiones periodísticas. "No es mi mano derecha. Eso lo dicen ustedes", puntualizó y agregó que "no he sido ni soy cajero de nadie".
Por 137 votos a favor y 49 en contra, más la abstención del propio De Vido, la Cámara de Diputados avaló que se realice un operativo judicial en el domicilio del ex funcionario.
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