EL TITULAR DE LA AGENCIA FEDERAL DE INTELIGENCIA, OSCAR PARRILLI, Y EL PRESIDENTE DE LA CONFEDERACIÓN ARGENTINA DE LA MEDIANA EMPRESA, OSVALDO CORNIDE, FIRMARON UN CONVENIO EN ESE SENTIDO.
La firma del convenio tuvo lugar ayer, en la sede de la CAME, en el barrio porteño de Retiro, entre Parrilli y Cornide, acompañados de colaboradores y miembros de la comisión directiva, respectivamente.
CAME es la primera cámara empresaria que adhiere al convenio diseñado por la AFI para la “Prevención de la Criminalidad Económica”, que apunta a desarticular el mercado ilegal de productos y sus delitos derivados.
"No vamos a investigar a los vendedores ambulantes o a los puesteros de La Salada porque son el eslabón más débil y de ellos se tiene que encargar el municipio", aclaró Parillo y agregó que "nosotros hacemos inteligencia, vamos a investigar quiénes están detrás de este gran negocio y cómo se organiza este delito, quiénes lo abastecen y cómo se desarrolla el contrabando”.
El titular de la AFI amplió que “estamos dando el puntapié inicial con los delitos económicos. El objetivo fundamental es el intercambio de información y trabajo para combatir el contrabando, violación de marcas y patentes, piratería del asfalto, etcétera”.
La Agencia Federal de Inteligencia también se abocará a combatir los delitos digitales que, según dijo Parrilli “es una amenaza que hoy tiene el mundo, porque se presenta no solamente como un problema para las empresas sino también para los Estados”.
Según cifras de CAME, el comercio informal moviliza en el país más de 52.700 millones de pesos por año, que “se traduce en menos empleo formal y derechos para los trabajadores pero además, en la merma de impuestos destinados al bien común como salud, educación, seguridad y obras”, señaló Cornide.
Asimismo, expresó que “el apoyo de la Agencia Federal de Inteligencia trae cierta tranquilidad al mundo empresario” y remarcó que “el avance de la venta ilegal en Argentina generó una alerta internacional, ante el avance de mafias organizadas que desarrollan un sistema de contrabando, robo y piratas del asfalto, trabajo esclavo, trata de personas en talleres clandestinos, fraude marcario, competencia desleal, narcotráfico y corrupción”.
Parrilli añadió entonces que la inteligencia argentina "debe perseguir los objetivos de la nueva ley que establece desde el terrorismo de Estado, lavado de dinero, trata de personas y narcotráfico hasta nuevos hechos que tienen que ver con amenazas contra el Estado”.
Según dijo Cornide, "CAME lidera la lucha contra el comercio ilegal en la Argentina, lo que ha despertado el interés de la organización internacional de policía criminal Interpol, que expuso ante CAME en el mes de septiembre, vinculando a este flagelo con el narcotráfico”.
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