Trabajadores del canal 13 y Todo Noticias, denunciaron que la empresa “decidió avanzar en su política de persecución gremial, aprietes y amenazas” hacia los periodistas. ElArgentino.com conversó con el delegado Ricardo Junghanns, quien confirmó las versiones y cree que la situación se agravará.
En un comunicado emitido por la Comisión Interna de delegados de Canal 13 y Todo Noticias, se denunció que “ante la negativa de la empresa de cumplir con los fallos judiciales, que la condenan a reinstalar en sus puestos de trabajo a dos delegados", la situación se agravó con un nuevo caso de "apriete". Ayer, en horas del mediodía, los trabajadores denunciaron que "mediante personal de seguridad privada del canal, se obligó a retirarse de la empresa a nuestro compañero delegado Brian Psenne, impidiéndole continuar con su jornada laboral de 8 horas".
“Denunciamos este nuevo acto arbitrario, persecutorio y discriminatorio de canal 13 y TN, como un intento de despido encubierto”, expresó el comunicado y agregó que reclaman “el respeto a los derechos constitucionales, laborales y gremiales que nos corresponden a todos los trabajadores de prensa de canal 13 y TN”.
En ese sentido, el delegado Ricardo Junghanns consideró que el ataque a Psenne “fue un escándalo, al retirarlo por la fuerza, siendo delegado y con los correspondientes fueros gremiales. A esta gente no les importa nada, absolutamente nada .Y suponemos que van a hacer lo mismo con (el delegado) Hugo Molini esta noche, pero vamos a ver qué pasa. Estamos preparándonos para eso”.
Junghanns detalló que Molini ha recibido notificaciones sobre "restricciones horarias" que sufriría en un futuro inmediato. "Es una amenaza, porque ellos tienen prohibido hacerle esto a un delegado gremial, cambiarle el horario, o ponerle horas por fuera de la actividad del resto de los compañeros, y todo eso busca matar a la Comisión Interna".
“Nosotros tenemos una comisión interna dividida, porque hay tres compañeros que pueden entrar a la planta y otros dos no, que somos Marcelo Moreira y yo. Tenemos prohibido el ingreso desde 2008, más allá de que la Justicia obligó al canal a reinstalarnos, y no lo cumplió”, contó Junghanns.
“A fines de 2010 celebramos nuevas elecciones y fue renovado el mandato de la Comisión Interna. A partir de ahí comenzamos un nuevo proceso asambleario dentro del canal que resultó histórico, porque realizamos 13 asambleas solamente en 2011 y después de 22 años sin poder llevar a cabo ninguna, y la empresa reaccionó en contra nuestra, ante los pedidos realizados”, dijo Junghanns.
Con respecto a los pedidos de libertad sindical y regularización del espacio laboral, la empresa contestó con “amedrentamientos, persecución, discriminación, amenazas, aprietes a los compañeros. Fueron llamados de a uno los compañeros que participaban de asambleas, para amenazarlos con represalias”. “Pero este fin de semana, justo cuando en Argentina se viven las primeras elecciones Primarias, abiertas y simultáneas para la profundización de la democracia, a nosotros nos llegaron telegramas intimidando a nuestros compañeros delegados”.
Si bien los delegados aún no habían definido las acciones inmediatas a tomarse en torno a la tensa situación, Junghanns sostuvo que los trabajadores se encuentran a la expectativa de cómo se irán desenvolviendo las próximas horas. Sin embargo, planean realizar una nueva asamblea. "No sabemos en qué va a terminar este día. Nosotros estamos convocando a asamblea en función de lo que suceda con Hugo Molini. La idea de la asamblea sería hoy, o en su defecto mañana, sin horario definido aún. Pero estamos en alerta, porque la República Clarín hace lo que se les canta", concluyó.
Esta última frase del delegado, demuestra que el personal de Clarín tiene muy en claro lo que nosotros sostenemos desde hace tiempo: somos todos iguales ante la ley, pero Clarín es más igual que otros.
Nuestra solidaridad y apoyo incondicional a los trabajadores de Canal de 13, de TN y de todo el grupo Clarín.
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