Con el sablazo que Mauricio le dio al boleto del subterráneo, incrementó en 10 millones las ganancias anuales del Grupo Roggio, empresa dueña de Metrovias. ¿La contraprestación extra? Ninguna.
Benito Roggio Transporte S.A. (empresa del Grupo Roggio), brinda servicios de “asesoramiento” a Metrovías S.A, lo que implica un ingreso del grupo del 2,6 % del total de los pasajes vendidos.
Pero, aunque el Gobierno porteño se presentó en la Justicia Federal para que se le ordene al Poder Ejecutivo Nacional que "se abstenga de ejecutar cualquier acto" que implique continuar con el transpaso de los subterráneos. Y violando el acuerdo firmado con el Poder Ejecutivo hace tres meses atrás, esto no implica que descuide las ganancias del Grupo Asesor de Metrovías.
En un informe presentado por Rafael Gentili, legislador de la Ciudad de Buenos Aires (Bloque Proyecto Sur), se señala que los ingresos del Grupo Roggio se van a incrementar, al igual que la tarifa, en un 127%, sin que los usuarios del subte tengan ninguna posibilidad de controlar por qué esta empresa recibirá más fondos ni en qué los va a invertir, puntualiza. Lo que implica que, en lugar de los $8.533.593 que recibía como canon por este “asesoramiento”, el Grupo Roggio recibirá en 2012, $19.393.987,52, o sea que el aumento de la tarifa le genera ingresos extras por más de 10 millones de pesos.
Además, dentro de las empresas que Metrovías contrata para abastecerse, buena parte de las mismas son propiedad del mismo Grupo Roggio (Benito Roggio Transporte S.A., Metronec S.A., Cía Metropolitana de Seguridad, entre otras), lo cual implica extraer ganancias de la concesionaria “libre de todo riesgo”.
Mediante este mecanismo de auto contratación cobran por servicios de gestión y administración, publicidad y comercio, asistencia al pasajero y vigilancia, cableado, administración de fondos, gerenciamiento y operación de sistemas, reparación de vehículos, limpieza, y seguridad.
Está claro que los dimes y diretes de Mugrizio Macri en relación a no aceptar el traspaso de los subtes, a pesar del acuerdo que él mismo firmó, no le impiden asegurarle, con el aumento de los boletos, una ganancia adicional de 10 millones de pesos al grupo Roggio sin ningún riesgo, salvo, por supuesto, para los usuarios.
Busines are busines.
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