Desesperados por el tremendo fracaso electoral de Ednarco Duhalde en las nacionales y de Francisco De Narcováez en la Provincia, los delfines opositores están buscando una nueva brújula que los ordene.
Desde las oficinas del PRO ya comenzaron a decir venturosos que recibieron llamados de dirigentes bonaerenses de los sectores de Ednarco Duhalde y de Francisco De Narcováez, buscando asilo político bajo el ala macrista. Pero, cómo aún no se confirmaron quienes serían los que ejecutarían el pase, cabe la pregunta de si se trata de una maniobra del PRO para posicionar a Mugricio Macri como líder opositor. Sin embargo, mas allá del interés de este sector, la fuga sería inminente.Al narcolorado, sus allegados le siguen cuestionando su acuerdo con Alfonsinito, que le trajo, además de una mala performance electoral, muchas criticas internas. Algo que él mismo reconoció cuando sostuvo que estaba arrepentido de haber roto relaciones con el hijo bobo de Franco Macri tras la elección legislativa del 2009. Con Duhalde pasó algo parecido, ya que fue el opositor que más votos perdió desde las PASO hasta las generales y su carrera política ya está en un ocaso.
Estos dirigentes probablemente vean que Mugricio Macri supo resguardarse a tiempo del huracán Cristina. Una huída que le servirá para otra guerra: la del 2015. Además supo vencer (muy escuetamente) su conflicto con el armado bonaerense. Jorge Macri, su primo, se quedó con la intendencia de Vicente López y el PRO comenzó a pisar otro suelo que no sea el porteño.
Las ratas abandonan el barco. Pero al menos -hay que reconocerlo- son ratas coherentes. Abandonan los barcos de Dulhalde y De Narcováez, para pasarse al barco de Macri.
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