EN SU GÉNESIS, LAS ELECCIONES PRIMARIAS, ABIERTAS, SIMULTÁNEAS Y OBLIGATORIAS (PASO) NACIERON PARA QUE LOS FRENTES Y PARTIDOS DEFINAN A SUS CANDIDATOS MEDIANTE EL VOTO POPULAR. SIN EMBARGO, SIN COMPETENCIA INTERNA, SE CONVIRTIERON EN UNA GRAN ENCUESTA QUE PERMITE HACER UNA PROYECCIÓN DE CARA A OCTUBRE, CUANDO EN LAS GENERALES SE DIRIMAN REALMENTE QUIÉNES Y CÓMO QUEDARÁ CONFORMADO EL NUEVO CONGRESO A PARTIR DEL 10 DE DICIEMBRE.
Con 40 diputados, la alianza de derecha Cambiemos es la fuerza que más lugares pone juego en la Cámara baja. De repetirse en las generales el buen desempeño a nivel nacional, además de renovar todas sumaría algo más de 15 legisladores.
El éxito en las urnas en distritos como la CABA, Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, San Luis y Entre Ríos, le permitiría engrosar su tropa legislativa hasta los 103 o 104 miembros de los 86 que tiene ahora. De todos modos, el interbloque que conforman el PRO, la UCR y la Coalición Cínica, más algunos aliados, no alcanzaría el quórum propio de 129 diputados.
Por su parte, el kirchnerismo legislativo no sufriría grandes cambios. Es que pone en juego 31 bancas obtenidas durante la mala elección que hizo en 2013, cuando perdió en la provincia de Buenos Aires pero incluso con menos votos que en esta elección. Renovaría casi la totalidad para mantenerse cerca de los 70 y seguir como primera minoría.
Mientras que el bloque que sufriría la merma más grande de integrantes es el que encabeza el Frente Rejuntador de Sergio Massa. Se explica porque el grueso de los 20 lugares que ponía en juego están en la provincia de Buenos Aires y ahora solo obtendría unas 5 bancas. En principio el espacio quedaría con algo más de 20 diputados.
En sus distintas versiones y disperso en varios bloques, el peronismo no kirchnerista tendría cerca de 40 bancas. Habrá que esperar si confluyen en algún espacio común, que podría convertirlos en la tercera fuerza de la Cámara baja.
Uno de los espacios que perderá casi todo su caudal es el Frente Amplio Progresista, que apenas renovaría dos de los ocho sillones que posee. También desaparecerán muchos monobloques.
Donde sin dudas sí se reforzará Cambiemos es en el Senado, siempre y cuando se repitan los resultados de las PASO en las octubre. Es que apenas pone en juego tres bancas de 17 que tiene ahora.
En estas PASO se impuso en San Luis, Jujuy, y Santa Cruz, y sumó o renovó un lugar en Formosa, La Rioja, Misiones y San Juan. Por el momento se impone en la controvertida elección en la provincia de Buenos Aires donde hasta donde fue escrutado -menos de un 96%- el candidato Esteban Bullrich se impone sobre Cristina de Kirchner por apenas 6.915 votos.
Como la definición entre quién gana la elección a senador depende solo de la cantidad de votos sin importar la diferencia, no es menor el hecho de que varios de los distritos que falta computar son donde mejor desempeño tuvo la expresidente. Restando lo que pueda ocurrir finalmente en Buenos Aires, Cambiemos tendría entre 24 y 26, aún sin quórum propio.
El Frente para la Victoria sufrirá una buena pérdida de bancas, restando por lo menos 7, la mitad de las que pone en juego. De todos modos seguirá como fuerza mayoritaria en la Cámara alta con cerca de 30 miembros, entre los que estaría Cristina Fernández de Kirchner.
Por último, el peronismo no kirchnerista, cuyos integrantes responden principalmente a gobernadores, contará con poco más de una docena de senadores.
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