miércoles, 20 de abril de 2011

Duhalde no puede con una interna pero insiste con su candidatura

Con la vista puesta en un acuerdo con Mauricio Macri, Duhalde no se hace cargo del "papelón" -como él mismo lo calificó- y dio por finiquitada la experiencia del Peornismo Residual, que lo tuvo como factotum y ahora, al parecer, como liquidador.

Los primeros fueron Carlos Reutemann, Felipe Solá, Das Neves y siguen las firmas. Ahora le toca a Ednarco Duhalde dar por terminada y supultada la experiencia interna del Peornismo Residual. "Voy por Unión Popular", anunció casi literalmente el ex presidente interino.

Luego de indicar que la interna en la que competía con gobernador puntano "no tiene ninguna validez" tras su defección para continuarlas en provincias del noroeste, Duhalde confirmó que no habrá candidato único del PR para las abiertas de agosto, donde probablemente los precandidatos serán legión.


“Yo en realidad incorporé a la Unión Popular y a Alberto Rodríguez Saá y su partido para conformar el Peronismo Federal, en ese momento yo no era presidente de la Unión Popular, pero nada cambia; ahora acepté la presidencia y haremos el acto de asunción en los próximos días”, explicó el precandidato a radio Buitre. En concreto: Duhalde asumirá como titular la ignota Unión Popular y ya es virtual precandidato presidencial por ese sello.

Además, dijo que intentará armar frentes electorales con el alicaído Movimiento de Integración y Desarrollo, que “está trabajando con nosotros y una cantidad de partidos provinciales que me han propuesto trabajar conjuntamente, con partidos provinciales y partidos nacionales también históricos”. Y adelantó que hablará “luego con dirigentes de fuerzas que tienen más adhesión de votantes para ver si se puede lograr un frente importante para el 14 de agosto”.

En cuanto a posibles frentes con otros partidos, consideró que hay que ponerse de acuerdo con otras fuerzas políticas “en trabajar sobre más políticas de Estado”, con los cuales “no necesariamente debe haber un acuerdo electoral” y dijo que “los límites para mí son los sectores antidemocráticos, de derecha y de izquierda”.

La "frentismo" de Duhalde tuvo su primer zafarrancho en la misma interna del justicialismo disidente, cuando el macrismo "lo ayudó" para derrotar por un puñado de votos a Rodríguez Saá en el episodio porteño de la frustrada experiencia.

No pudieron manejar una interna entre dos tipos y quieren gobernar a 40 millones de argentinos. Héctor Magnetto se está replanteando seriamente un cambio en su equipo gerencial.

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