La biblioteca popular Palabras del Alma, ubicada en la localidad bonaerense de Pilar, que rechazó 40.000 pesos de una donación por provenir de un fondo buitre recibió ayer la visita del viceministro de Economía de la Nación, Emmanuel Alvarez Agis, quien destacó "la dignidad de los integrantes de ese espacio, un gesto que cobra otra significación cuando se toma en medio de la necesidad".
"Este es un verdadero gesto de dignidad y patriotismo porque se tomó en un contexto de necesidad", dijo el viceministro durante la recorrida por la obra en uno de los barrios más pobres de Pilar.
Alvarez Agis sostuvo que "es un orgullo estar en un lugar donde las mujeres levantan las paredes de las aulas, donde sus hijos van a terminar la secundaria a través del Plan Fines".
Después de rechazar los 40.000 pesos que Dart Sudamericana le había asignado a la Biblioteca Palabras del Alma, ubicada en el barrio Peruzotti, la comisión directiva de la entidad recibió el 3 de septiembre pasado la suma 60.000 pesos de manos la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
En tanto, el Ministerio de Desarrollo Social envió materiales de construcción y recursos humanos del Plan "Ellas Hacen" y de "Argentina Trabaja", que son cooperativistas de la zona de Pilar.
Para el presidente de la comisión directiva de Palabras del Alma, Hernán Nemi, "además de cubrir las necesidades que teníamos para terminar el edificio nuevo, esta decisión -que no fue nada fácil-, nos hizo crecer como personas porque estamos orgullosos de lo que hicimos".
"Se instaló el tema de los fondos buitre entre nosotros. Tuvimos que aprender quiénes eran y por qué pusieron en jaque al país; y nosotros, que buscamos cambiar y ser mejores personas, nos dimos cuenta de que no podíamos aceptar dinero de alguien que nos ataca como país, como comunidad", explicó Nemi que construyó la biblioteca hace seis años a partir de un iniciativa de un colegio de monjas de Pilar.
El lugar del nuevo edificio es un terreno cedido por la Municipalidad de Pilar, a siete cuadras de la casa donde funciona hoy la biblioteca, que es alquilada a ese colegio de monjas de donde salió la idea de crear una biblioteca popular.
El edificio, que ya inauguró dos salas para dar clases a estudiantes del plan Fines, fue recorrido por los funcionarios del Ministerio de Economía bajo la instrucción de Federico Fuentes, un ingeniero voluntario de la biblioteca, que acompaña la dirección de la obra, ahora a cargo de Desarrollo Social.
La biblioteca consta de más de 9.000 volúmenes, una primaria de adultos, seis comisiones del Plan Fines, un espacio para el grupo de mujeres "La Mesa" , que trabaja temas de género y economía familiar; además, se da apoyo escolar para niños, taller de matemáticas, de poesía, café literario para adultos, entre otras actividades.
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