Con el lanzamiento del programa "Qunita", la legisladora porteña trató de que algunos medios instalen sus acusaciones que, finalmente, no tuvieron valor real.
Con el lanzamiento del programa "Qunita", la legisladora porteña Graciela Ocaña repitió una vez más lo que mejor sabe hacer: tratar de que algunos medios hablen de ella a partir de una denuncia de supuestas irregularidades. En esta nota, hacemos un repaso de las acusaciones que lanzó y quedaron en la nada.
> El falso departamento Mariano Recalde: Es la "denuncia" que sin dudas encabeza el ranking de dislates llevados a cabo por la legisladora porteña. Sucedió en octubre de 2014, cuando le adjudicó a Mariano Recalde la propiedad de un departamento que el presidente de Aerolíneas Argentinas no solo no poseía sino que ni siquiera conocía. A los dos días de la denuncia, el propio Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires desmintió a Ocaña respecto de la propiedad del inmueble, y la diputada debió reconocer que no había chequeado la documentación que presentó en los medios.
> Las joyas de Cristina: En marzo de este año, Ocaña protagonizó uno de los episodios más insólitos de su dilatada trayectoria como visitadora de los tribunales federales: se presentó ante el juez Sergio Torres con una carpeta que contenía 200 recortes periodísticos con fotos de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Lo que motivó la supuesta denuncia fue la solicitud de averiguación de la procedencia de las joyas y los accesorios que llevaba puestos la jefa de Estado en distintos actos públicos y reuniones protocolares. Nunca más se supo nada.
> Contra Moyano: Covelia, medicamentos truchos, la mutual de Camioneros, y hasta computadoras que le robaron de sus oficinas. De todo eso (y más) responsabilizó Ocaña a Hugo Moyano, para luego terminar compartiendo el mismo espacio político con el líder sindical, acompañando a Francisco De Narcováez en las elecciones de 2013. Demás está decir que ninguna de las denuncias de la diputada contra Moyano llegaron a algo.
> Prótesis de Biomet: Si bien no tuvo demasiado rebote mediático, la denuncia del pago de coimas de la empresa norteaméricana Biomet merece ser recordada por la desopilante intervención de Ocaña en la repercusión que tuvo la noticia en nuestro país. En marzo de 2012 esta empresa reconoció ante la SEC (el equivalente estadounidense a nuestra Comisión Nacional de Valores) que había pagado coimas en algunos países para ingresar las prótesis que fabricaban. Como uno de esos países era la Argentina, Ocaña tomó el documento presentado por Biomet en Estados Unidos y lo presentó como una denuncia propia ante el juez federal Marcelo Martínez Di Giorgi. Insólito. Hasta el momento, no se supo nada más del tema.
> Denuncia a Sebastián Sforza: En septiembre de 2008, siendo todavía Ministra de Salud de la Nación, Ocaña denunció a la droguería Seacamp con el mismo modus operandi que utilizó siempre: a partir de una nota periodística de Clarín. La asucasión contra la empresa era por un supuesto fraude en la venta de medicamentos a las obra social de los trabajadores del Agua y Energía Eléctrica de Mendoza. Hasta ahí lo mismo de siempre, salvo por el hecho de que uno de los denunciados era el titular de Seacamp, Sebastián Sforza, una de las víctimas de lo que se conoció como "el triple crimen de General Rodríguez". Como los difuntos no pueden rendir cuentas a la Justicia (al menos la de los hobmbres), lógicamente la denuncia quedó en la nada.
> Otra vez contra Cristina: En 2011, dijo que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner la había insinuado, cuando todavía era ministra de Salud, que "no investigara" al sindicalista Juan José Zanola en la causa denominada como "mafia de los medicamentos". El rechazo de todo el arco político a aquellas declaraciones fue tan contundente, que hasta sus ex compañeros de la Coalición Cínica la tildaron de "oportunista", por decir esas cosas estando ya fuera del gobierno.
> Plan Nacer: Otra de sus denuncias estuvando al frente del Ministerio de Salud tuvo que ver con el Plan Nacer, un programa implementado para incentivar los controles sanitarios de las madres y los recién nacidos. A raíz de una nota periodística del diario Clarín (cuando no), Ocaña afirmó la apertura de un sumario administrativo para investigar posible pago de sobreprecios, y una causa abierta en la Justicia federal. Ninguna de las dos investigaciones consiguió probar nada, y vale la pena aclarar que en el caso del sumario ministerial, era ella misma la responsable de llegar a un resultado. Tuvo más de un año para hacerlo y no encontró nada.
> Fútbol Para Todos: Aprovechando el escándalo mundial que se originó por la denuncia del Departamento de Justicia de los Estados Unidos para que se investiguen hechos de corrupción en la FIFA, y que involucra, entre otras, a una empresa socia del Grupo Clarín, la legisladora volvió a la carga con su célebre denuncia contra el Fútbol para Todos. Hábil para el discurso mediático, Ocaña nunca aclara en los medios que su denuncia judicial no involucra al gobierno, sino a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), por el modo en el que se distribuyen los ingresos de televisación de los partidos entre los clubes. Basta con ingresar a su página web para leer los escritos que ha presentado ante la jueza María Servini de Cubría para comprobar que no hay ningún funconario apuntado por sus acusaciones, aunque cuando después habla con los periodistas siembra un manto de sospecha sobre el accionar del gobierno respecto de este asunto.
> Los sueldos del PAMI: "Denuncia" disfrazada de proyecto de ley inclasificable, no tanto por su contenido sino porque cuando ella misma fue directora del PAMI no cumplía con los requisitos que ahora quería implementar. El proyecto en cuestión fue presentado en 2013, cuando la entonces diputada nacional Ocaña se dio cuenta de que los sueldos de los directivos de la obra social de los jubilados eran demasiado altos, y propuso ponerles un tope. La iniciativa causó indignación de los gremios que nuclean a los trabajadores del organismo (UPCN, ATE y Utera), dado que cuando ella estuvo al frente del organismo, no solo no se puse un tope a su salario, sino que ni siquiera cumplía con los requisitos del decreto que regula el sistema de empleo público nacional para desempeñarse en el cargo.
> Duelo por Nisman: No se trata en este caso de una denuncia sino de un pedido. Una de las pocas iniciativas legislativas que se le conocen a Ocaña desde que es diputada en la Ciudad de Buenos Aires. El 27 de enero de este año, nueve días después de la muerte del ex fiscal Alberto Nisman, Ocaña le pidió a Mugrizio Macri que declare dos días de duelo por el fallecimiento del ex titular de la UFI AMIA. No hubo respuesta por parte del líder del PRO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario