El jefe de Gabinete se refirió ayer al aumento del 20 al 35 por ciento el recargo a la compra de dólares para turismo y al uso de tarjetas en el exterior y en tal sentido dijo que la medida se tomó porque "hay un drenaje de divisas que se da a través de operaciones de turismo" y el gobierno debe ser "cuidadoso en la administración de reservas". "Consideramos que es el sendero es el correcto", afirmó.
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, justificó ayer el aumento del 20% al 35% en la percepción que la AFIP cobra como adelanto de impuesto a las Ganancias y Bienes Personales en los consumos con tarjetas de crédito y débito realizados en el exterior del país al asegurar que "hay un drenaje de divisas que se da a través de operaciones de turismo" aunque aclaró que la situación "tenderá a normalizarse".
"Creemos que hay un drenaje de divisas que se da a través de operaciones de turismo y debemos ser muy cuidadosos en la administración de reservas", dijo Capitanich en su ya habitual rueda de prensa desde la Casa Rosada y agregó: "Observamos que tenderá a normalizarse en virtud de las asimetrías de ciclo, ya que hay momentos de mayor y menor liquidación. Lo que consideramos es que el sendero es el correcto".
Más tarde, Capitanich expuso ante la Unión Industrial Argentina (UIA) los principales ejes que el Gobierno nacional impulsará para la inversión pública en los próximos y destacó la necesidad de que la Argentina cuente con un "tipo de cambio real efectivo competitivo a largo plazo" ya que "el mundo global exige a la Argentina de un modo inexorable una estrategia que permita reducir distancias y desarticular brechas de carácter estructural".
Para eso, el jefe de Gabinete llamó a reducir los "costos sistémicos" mediante la mejora de competitividad. "¿Cómo se logra? Muy sencillo, la Argentina necesita aumentar la inversión bruta interna de la inversión pública y privada", puntualizó.
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