Siguen las repercusiones sobre el polémico artículo de Marcos Aguinis en La Nazión, donde terminó reivindicando el “ideal” de las juventudes hitlerianas para hacer una analogía con las "fuerzas (¿paramilitares?) de Milagro Sala". Rechazo de Víctor Hugo y autoridades de entidades judías.
En La Mañana de Víctor Hugo, la columnista Cynthia García -también panelista de 678- se refirió a la polémica columna del “inefable escritor” -como lo definió- Marcos Aguinis en La Nazión.
Entre los párrafos más polémicos, Aguinis señaló que "las fuerzas (¿paramilitares?) de Milagro Sala provocaron analogías con las Juventudes Hitlerianas. Estas últimas, sin embargo, por asesinas y despreciables que hayan sido, luchaban por un ideal absurdo pero ideal al fin, como la raza superior y otras locuras".
Para García, se trata de “un artículo que en cualquier clase de periodismo sería no publicable” y se preguntó porqué la DAIA “decidió no emitir un comunicado” de repudio al escrito de Aguinis, ya que el “ideal” reivindicado por el autor contemplaba, entre otros crímenes, el exterminio de los judíos.
El secretario general de la DAIA, Fabián Galante, incluso, mostró también su disconformidad con el silencio de esa entidad, que aunque emitió un comunicado en términos difusos y vagos, no personalizó la crítica en quienes banalizan el exterminio judío.
Galante habló con Víctor Hugo y se que quejó de que, si bien hubo una declaración, “no hace ninguna alusión al escritor Marcos Aguinis y su columna en La Nazión”.
En ese sentido, dijo que “DAIA va a ser una institución legítima en la medida en que cada vez que se produzca una banalización del Holocausto, fije su posición independientemente de quién sea la persona” porque, afirmó “nosotros defendemos la dignidad judía”.
Como se recordará, en una carta de lectores que también publicó La Nazión, el senador Aníbal Fernández envió una respuesta a Aguinis: "No se puede dejar pasar. No es bueno dejarlo pasar. No lo puedo dejar pasar. Porque algunos silencios generan complicidad. Sólo que, a veces, la respuesta necesita decantar. Encontrar su canal. Lograr el tono adecuado y, en este caso, era difícil. Por la dimensión del exabrupto, por el tamaño de la barbaridad, por lo revulsivo del metamensaje y por la profundidad del odio".
"No importa cuán en las antípodas ideológicas se encuentre el escritor del peronismo. No importan las razones ni las emociones, por viscerales que fueran", continuó Fernández y agregó: "Reivindicar a las juventudes hitlerianas a partir de su compromiso ideológico sólo con el fin de atacar a algunas agrupaciones militantes que, democráticamente, expresan su apoyo al Gobierno es, sencillamente, un desatino mayúsculo e inadmisible. No sólo por lo que expresa en términos históricos, sino por su significación en nuestro particular momento histórico-político".
"Si bajo la premisa '...un ideal; absurdo, pero ideal al fin...' se puede justificar la Shoá, preparémonos para que en cualquier momento justifique los crímenes de lesa humanidad y el plan sistemático de apropiación de bebes", sentenció Aníbal.
"Sé que esto que digo es el sentimiento de millones de compatriotas que, seguramente como yo, no pueden salir de su asombro por el libelo publicado en el diario La Nazión el 21 de agosto. No dudo que estas palabras, de una u otra forma, expresan a un determinado universo y aunque parezcan tardías, esgrimen como justificación el no callar. Dejar pasar semejante atrocidad significa que, quien la genera, goce de esa sensación de impunidad que lo impulsa a seguir con los ataques y los improperios", continuó Aníbal.
"Por eso estas palabras. Pensadas. Analizadas... Porque quien se extralimita de la manera en la que Aguinis se extralimitó debe saber que no es gratis", finalizó Fernández.
La intelectualidad derechosa está nerviosa y por eso, a veces, se van al pasto y dicen públicamente lo que, por lo general, ocultan.
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