Como alimento exclusivo en bebés menores de cuatro meses, creció del 12 al 40% en los últimos ocho años, informó el ministerio de Salud bonaerense en el marco del inicio, el sábado, de la Semana de la Lactancia Materna.
“La leche materna es un alimento insustituible para el crecimiento sano del bebé. Y en base a esa premisa trabajamos con distintas estrategias para promover la lactancia materna desde la primera hora de vida hasta los seis meses de manera exclusiva”, explicó ayer el ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Alejandro Collia.
"Si bien asumimos que aún falta, hemos mejorado mucho, y nuestro objetivo es que de cara a los próximos años ese porcentaje se eleve al 60 por ciento”, agregó el funcionario.
Hoy funcionan consultorios y guardias exclusivas de lactancia materna en diversas maternidades de la Provincia y se capacitan profesionales de la salud en la temática, detalló un comunicado de la cartera sanitaria bonaerense.
Una de las últimas estrategias que se llevó adelante fue la apertura de lactarios en distintas dependencias públicas, para que las mamás puedan extraer la leche en un espacio cómodo y especialmente adaptado a sus necesidades, mientras cumplen con su jornada laboral.
Según informó la cartera, promover el amamantamiento a través del ámbito de trabajo es el lema que este año tiene la Semana Mundial de la Lactancia, que se celebra desde el 1 al 7 de agosto.
"Si promovemos la internación conjunta entre la mamá y el bebé, siempre y cuando ambos estén sanos, se allana el camino para que el amamantamiento comience a partir de la primera hora de vida, tal cual está recomendado”, sostuvo Collia.
Desde el Ministerio señalaron que la lactancia materna es considerada una forma inigualable e imprescindible de facilitar el alimento ideal para el crecimiento y desarrollo correcto de los chicos, por sus innumerables beneficios para la salud a corto y largo plazo, por lo que debe ser alimento exclusivo durante los primeros seis meses del recién nacido.
Luego de ese período, lo ideal es seguir amamantando al bebé mientras se introducen otras comidas complementarias en su dieta, hasta un mínimo de dos años.
La directora de Maternidad e Infancia del gobierno bonaerense, Flavia Raineri, señaló que “la leche materna proporciona toda la energía y los nutrientes que se necesitan durante los primeros meses de vida, reduce la mortalidad infantil por enfermedades de la infancia, como la diarrea o la neumonía, contribuye a la salud y el bienestar de la mamá, y es más segura e higiénica”.
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