Legisladores de todo el espectro político porteño se mostraron preocupados ante las revelaciones periodísticas que afirman que un miembro la Policía Metropolitana está involucrado en tareas de inteligencia en una causa por reventa ilegal de entradas en River.
En su edición del ayer, el diario Tiempo Argentino publicó una investigación en la que afirma que el integrante de la Policía Metropolinazi, Alejandro Rivaud, está siendo investigado por haber desarrollado tareas de inteligencia, actividad vedada a esa fuerza por la Ley de Seguridad Pública de la Ciudad de Buenos Aires.Según consigna el matutino la justicia busca establecer si Rivaud, quien antes de ingresar a la Metropolitana cumplió tareas de inteligencia en la Policía Federal y como personal civil en la Fuerza Aérea, se infiltró ilegalmente en la hinchada del club de Núñez en una causa por reventa ilegal de entradas.
La salida a la luz de la denuncia generó un amplio repudio en todo el espectro político porteño. Pablo Ferreyra, legislador porteño de Izquierda Popular, señaló que los antecedentes de Rivaud "muestran qué tipo de fuerza de seguridad quiere el jefe de Gobierno porteño" y afirmó que "el perfil y los antecedentes del funcionario debería bastar para negarle su participación en una policía de proximidad, como la Metropolitana".
En tanto, el diputado porteño Gustavo Vera (UNEN) afirmó que no le "extraña" que un agente de la Policía Metropolinazi aparezca vinculado a una maniobra de espionaje ilegal y consideró “probada” la relación del gobierno porteño con barras bravas.Vera consideró que "en cualquier caso es un delito: si estuvo haciendo tareas de infiltración o si hay ligazón con la barra brava de River Plate, cosa que no me extrañaría, porque la relación de sectores de la ciudad con barras es pública y notoria".
En comunicación con Télam, la legisladora porteña del Frente para la Victoria, Claudia Neira denunció que "buena parte de los integrantes de las fuerzas policiales que el Estado Nacional intentó depurar, fueron acogidas por Macri quien les dio un salvoconducto en la Policía Metropolitana".
En ese sentido, la diputada también remarcó que la vinculación entre Rivaud y el superintendente de Investigaciones de la Metropolitana Carlos Alberto Kevorkian "evidencia que la actuación de Rivaud, no es un práctica individual sino que es el modus operandi de una fuerza que sigue vulnerando la Ley de Seguridad Nacional, que le prohíbe llevar adelante tareas de inteligencia".
Las críticas a la Policía Metropolinazi también llegaron desde la izquierda con representación parlamentaria. El legislador Alejandro Bodart (MST), consideró que “es una fuerza de seguridad creada sobre la base ideológica y operativa de Jorge 'Fino' Palacios, por lo tanto concebida como un aparato de inteligencia y represión”.
El legislador recordó que al momento de armar la fuerza el doblemente procesado jefe de Gobierno “la presentó como una policía de cercanía pero era un verso”, luego convocó “a miembros exonerados de la Policía Federal, tipos vinculados a la dictadura”.
En tanto, Dante Gullo, legislador del FPV afirmó que “este nuevo caso de espionaje pone en situación delicada a Macri".
El histórico militante peronista sostuvo que "si Macri sigue incorporando gente de inteligencia y van a seguir haciendo inteligencia desde la Metropolitana estamos en el horno", en referencia al caso de las escuchas en 2009, por el que el jefe de gobierno está procesado junto al ex comisario, Jorge "Fino" Palacios.
"Esto confirma lo que ya está en la justicia, en el que está involucrado Macri con Ciro James y Palacios que es la transgresión que significó que la Metropolitana se conformara con la idea de hacer inteligencia interna", afirmó el legislador porteño
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