El ministro de Planificación Federal destacó que "más allá de algunos temas puntuales en la distribución producto de la alta demanda por las temperaturas extremas, a nivel global el sistema está funcionando normalmente con niveles de generación y reservas adecuados".
De esta manera, el ministro salió al cruce del artículo publicado en el diario La Nazión, titulado "Impulsan cortes selectivos de luz para evitar una crisis energética".
"La capacidad instalada de generación eléctrica alcanza los 28 mil megavatios, por lo que está perfectamente preparado para abastecer picos de consumo como el de ayer de 23.332 megavatios", explicó el ministro a través de un comunicado.
En ese sentido, recordó que "en los últimos 12 meses se incorporaron más de 1.600 megavatios a través del alcance a plena potencia de la Central Nuclear Néstor Kirchner de 745 Megavatios, la Central de Vuelta de Obligado de 540 Megavatios y el Acuerdo de Generadores por 350 megavatios, todas obras que forman parte del Plan Energético Nacional que el Gobierno Nacional planifica y ejecuta desde el 2004 y que garantiza plenamente el abastecimiento eléctrico".
"El mes próximo -agregó- continuaremos ampliando la potencia instalada con la inauguración de la central térmica Guillermo Brown en Bahía Blanca de 600 megavatios, mientras que en el segundo semestre se incorporará la usina a carbón de Río Turbio y ya comenzó la construcción de las represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic sobre el río Santa Cruz, que aportarán 1.740 megavatios".
Por lo expuesto, De Vido afirmó que "el próximo gobierno encontrará un sistema que tuvo la mayor ampliación de la historia, haciendo frente a un crecimiento exponencial de la demanda y una planificación para la próxima década".
En tal sentido, el ministro señaló que "los grandes consumidores tienen obligación de autogenerarse en situaciones de picos de demanda, sin necesidad de que exista ninguna orden, de la misma manera que cuando una distribuidora interrumpe el suministro de una subestación por un desperfecto, actúa de acuerdo a los procedimientos establecidos y no por un supuesto `pedido´".
Por otra parte, resaltó que "las interrupciones en el suministro eléctrico por problemas de distribución se redujeron drásticamente en comparación del año pasado por las 2.200 obras ya finalizadas en zonas de Edenor y Edesur, así como la incorporación de 23 transformadores de tres subestaciones móviles" y aseguró que "los problemas puntuales que persisten se solucionarán definitivamente cuando concluyan las 200 obras que están en marcha".
Asimismo, el ministro negó que existan "problemas" en Yacyretá, como indicaban versiones periodísticas de la señal TN del Grupo Clarín, y resaltó que "la central hidroeléctrica de Yacyretá está funcionado de acuerdo a lo previsto, produciendo 20.000 GWh de energía por año, dentro del rango esperado en su proyecto original y gracias a que alcanzó la cota 83 metros en su embalse, en el año 2011 duplicó su potencia respecto a 2003".
"Los únicos problemas que tiene Yacyretá son heredados de la década del ´90 y se deben a la irresponsable paralización de las obras y la decisión de hacerla funcionar a una cota inferior a la de diseño", detalló el ministro, y agregó que "desde el año 2012 se implementa un programa de rehabilitación de su parque generador sin que esto afecte en forma alguna la operación ni el rendimiento anual de la central".
En relación con los comentarios del periodista Jorge Oviedo en el diario La Nazión ignorando los logros del Plan Energético Nacional, y relativizando la importancia de la plena potencia de Atucha II, De Vido indicó que no le sorprende, porque "son los mismos que hace 12 años preanuncian catástrofes energéticas, pretendiendo imponer una profecía autocumplida, porque no comparten los lineamiento de nuestras políticas: tarifas más bajas y competitivas de la región y expansión del suministro en todo el país con un fuerte sesgo federal e inclusivo".
"No toleran que hayamos logrado éxitos incuestionables como alcanzar la plena potencia de Atucha II (hoy Néstor Kirchner) con nuestro propios recursos, tanto humanos como financieros, y por eso se muestran enojados. Son nostálgicos de las políticas neoliberales con tarifas dolarizadas, un sector nuclear paralizado y un país sometido, pero ningún problema puntual de distribución eléctrica les va a dar la razón", concluyó De Vido.
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