“Entiendo que la prueba alcanza para constituir la sospecha necesaria que el debido proceso requiere para recibir las declaraciones indagatorias”, dijo el Secretario de Derechos Humanos de la Nación.
El secretario de Derechos Humanos de la Nación cuestinó la decisión del juez Ercolini de rechazar el pedido de indagatoria para Héctor Magneto, Ernestina Herrera de Noble y Bartolomé Mitre en le marco de la causa por la apropiación ilegal de la empresa Papel Prensa.
“Evidentemente, el Juez Ercolini ya tenía un temperamento previo al pedido del fiscal. Pero al rechazar el pedido de indagatorias no responde a los extremos de hecho y de derecho que el Dr. Gómez Barbella planteó, puesto que el episodio que se denuncia es la apropiación ilícita de Papel Prensa, lo que se llevó a cabo en un contexto de amenazas extorsivas, en un país donde una dictadura había disuelto el Congreso, había reemplazado a los jueces nombrados constitucionalmente, había prohibido la actividad política, había intervenidos los sindicatos, había hecho desaparecer o asesinado a miles de personas, había instalado centros clandestinos de detención en todo el país y detenido ilegalmente a cientos y cientos de argentinos”, sostuvo Fresneda
“En ese marco la junta ordenó a los Graiver vender Papel Prensa a Clarín, La Nazión y La Razón, y disolver las restantes empresas del grupo. Esto es lo que se debe comprobar, si existieron las conductas amenazantes y coercitivas que denuncia el fiscal al momento de la transferencia”, agregó.
En ese sentido, el funcionario aclaró que “lo que se denunció y lo que el fiscal considera que es prueba suficiente de la extorsión, no se limita a una pericia contable, que por otra parte ya se había hecho en 1977 por pedido del juez de la sucesión de David Graiver, con intervención del Banco Nacional de Desarrollo, pericia que arrojó que el precio de la empresa era mucho mayor que el fijado en la cesión de acciones arrancada a Lidia Papaleo, Rafael Ianover y el resto de los integrantes del grupo. Por otra parte ni siquiera ese precio se pagó: solo se entregó una suma ínfima y luego, como los integrantes del Grupo Graiver fueron secuestrados, torturados y puestos a disposición de tribunales militares, sus bienes fueron interdictos y ya no podían cobrar nada”.
No obstante, Fresneda se mostró respuetuoso de la decisión del juez aunue sostuvo que espera que la pericia sea resuelta con la mayor celeridad, y que se cumplan todas las medidas pendientes, para que el Juez “cuente con todos los elementos que pretende tener para su mejor convicción”.
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