EN EL MARCO DE LA FIRMA DEL ACUERDO GLOBAL SOBRE CAMBIO CLIMÁTICO, LA PRESIDENTA DE BRASIL EXPONDRÁ HOY ANTE LÍDERES MUNDIALES CÓMO LA DERECHA INTENTA DERROCARLA USANDO FALSAMENTE LA HERRAMIENTA DE JUICIO POLÍTICO.
Después de que la oposición, encabezada ahora por el vicepresidente Michel Temer que quedó en el país, intentara que Dilma Rousseff no dejara Brasil, la presidente viajo a la Organización de Naciones Unidas (ONU) en el marco del acuerdo global sobre el cambio climático.
Ayer por la tarde, Rousseff denunció el golpe de Estado que está en proceso en su país "donde está amenazada la democracia”.
En una conferencia de prensa ofrecida a corresponsales extranjeros, la Presidenta de Brasil alertó que "no se trata realmente de un impeachment, sino un golpe de estado y una tentativa de elección indirecta".
Asimismo,agregó que "es un golpe, porque está revestido de un pecado original: no tiene base legal que caracterice un crimen de responsabilidad", y remarcó que se trata de una actitud de "venganza".
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