Alumnos de los colegios secundarios porteños Mariano Acosta y Normal 1 continuaron ayer, por segundo día consecutivo, con la toma de esos establecimientos en rechazo a la reforma curricular que pretende implementar el Gobierno de la Ciudad en todas las escuelas a partir de 2014.
"Hace meses que reclamamos de distintas maneras nuestro rechazo a esta reforma educativa que pretende implementar el gobierno de Macri, ya que encontramos que representa una merma en el nivel académico de las escuelas", dijo a Télam Matías Delgado, presidente del Centro de Estudiantes del Mariano Acosta.
Si bien admitió que "estamos de acuerdo con una reforma", dijo que la misma "se tiene que dar con una intención de mejora".
Delgado precisó que la toma, que se votó en asamblea, continuará hasta "recibir una respuesta concreta del gobierno porteño".
El dirigente estudiantil informó que además del Mariano Acosta y el Normal 1, hay otras escuelas secundarias porteñas "en asamblea", por lo que no se descarta que "se sumen nuevas tomas".
"Queremos que los docentes y alumnos sean actores partícipes de esta reforma, queremos intervenir resolutivamente en el armado de los planes de estudio", indicó el joven.
Añadió que "otro de los reclamos que presentamos a través de la toma es poder mantener la riqueza educativa que hay en la Ciudad".
En ese sentido, el dirigente del Centro de Estudiantes explicó: "Hoy tenemos 144 orientaciones, lo que demuestra una riqueza académica muy fuerte. Pero según el Consejo Federal (de Educación), para poder homologar esos títulos tenemos que perder toda esa riqueza, reduciendo el número de orientaciones a 10".
Según Delgado, en la actualidad "está estipulado que 10 orientaciones sean el piso de esta reforma, pero el Consejo Federal se expidió diciendo que ese número sería el techo, lo que nos afecta directamente ya que esta es una escuela que forma docentes con orientación pedagógica, orientación que desaparecería".
El gobierno porteño, tras una serie de tomas efectuadas en 2012, resolvió efectuar durante este año jornadas de debate en las escuelas para explicar las características de la "Nueva Escuela Secundaria de calidad" (NESC) a implementarse en marzo del 2014.
La NESC surge como respuesta del Ejecutivo capitalino a las nuevas pautas establecidas por el Consejo Federal de Educación a todas las provincias del país, pero que en el caso de la Ciudad, su aplicación corresponde a un programa elaborado por el gobierno de Mugrizio Macri, en el que reduce la carga horaria de materias como Historia o Geografía en los colegios normales.
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