El genocida Jorge Rafael Videla no recibirá ningún honor militar cuando sea sepultado, ya que fue destituido del Ejército y, además, hay una resolución que prohíbe honras en los funerales de integrantes de las Fuerzas Armadas que hayan estado involucrados en causas de violaciones a los derechos humanos.
Fuentes castrenses explicaron que a Videla no se le brindarán honores como establecen los reglamentos cuando muere un militar en actividad o en situación de retiro.
En 2009, la entonces ministra de Defensa, Nilda Garré, firmó una resolución en la que se prohíbe terminantemente rendir honores durante su funeral a represores fallecidos, decisión administrativa que sigue vigente, precisaron los voceros.
Videla, quien falleció a los 87 años en el Complejo Penitenciario Federal Número 2 de la localidad bonaerense de Marco Paz cumpliendo una condena a perpetua por delitos de lesa humanidad, ingresó al Colegio Militar de la Nación el 3 de marzo de 1942 y se graduó el 21 de diciembre de 1944 como subteniente del arma de Infantería de la promoción 73.
Había cursado la Escuela Superior de Guerra entre 1952 y 1954 y se licenció con el título de oficial de Estado Mayor.
En 1971 fue ascendido a general de brigada y nombrado como director del Colegio Militar de la Nación y en 1975 fue jefe del Ejército durante el gobierno constitucional de María Estela Martínez de Perón.
El 24 de marzo de 1976 encabezó, junto al almirante Emilio Eduardo Massera y el brigadier Orlando Ramón Agosti, el golpe de Estado que derrocó a Martínez de Perón.
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