EL PROGRAMA CREDITICIO QUE IMPLEMENTÓ EL GOBIERNO ANTERIOR VENCE A FIN DE MES. LAS CÁMARAS DE COMERCIO BUSCAN EXTENDERLO PARA REACTIVAR EL CONSUMO EN LAS FIESTAS, PERO EL DEBATE POR LAS COMISIONES DE LAS TARJETAS TRABA LA DISPUTA.
Tanto desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) como desde la cámara de Comercio (CAC) enfatizaron que las cuotas sin interés son fundamentales para las ventas, en especial de cara a diciembre, la temporada más alta del año.
En ese sentido, el vocero de CAME, Vicente Lourenzo, señaló que "el 'Ahora 12' tiene que continuar porque es un instrumento clave para los comercios chicos, que son los que más sufrieron el golpe de la caída del consumo en los primeros meses de 2016".
Sin embargo, las entidades bancarias advirtieron que dicha renovación está en peligro. Desde los bancos de capital nacional, agrupados en ADEBA, indicaron que una eventual rebaja del arancel de 3% a 1,5% "nos deja sin margen para mantener ninguna promoción, y obviamente el 'Ahora 12' también se vería afectado" y en este sentido aclararon que los comerciantes "tienen todo el derecho de reclamar como lo vienen haciendo, pero no digan más que el 'Ahora 12' es sólo un subsidio del Estado, cuando somos los bancos los que ponemos la mayor parte".
Sobre cómo se financian las cuotas, los bancos ofrecen una tasa diferencial de 10% anual para los comercios que venden en cuotas, cuando en una operación normal esa misma tasa se ubica en niveles cercanos al 35%. Pero esto es posible, además, porque el Banco Central reduce tres puntos de encaje a los bancos que otorgan ese financiamiento. Por lo tanto, el subsidio para las ventas es compartido básicamente entre la banca y el Estado. "Es una falsedad total decir que los bancos no tenemos nada que ver con el 'Ahora 12'", se quejan en el sector financiero.
Esta disputa, se produce cuando falta menos de un mes para que venza el programa "Ahora 12", el próximo 30 de septiembre. El régimen macrifascista está especialmente interesado en mantenerlo, justamente para promover una reactivación a fin de año.
Mientras que las cámaras comerciales presionarán para seguir vendiendo en cuotas sin interés, los bancos harán fuerza para frenar la rebaja de aranceles o como mínimo acotar la sustancial disminución que propicia CAME, que además procura que las transacciones con tarjeta de débito sean gratuitas.
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