EL SUSPENDIDO JEFE DE LA POLICÍA DE LA CIUDAD, JOSÉ POTOCAR, PRESENTÓ SU RENUNCIA AL CARGO, LA QUE FUE ACEPTADA POR EL JEFE DE GOBIERNO PORTEÑO, HORACIO RODRÍGUEZ LARRATA, EN MEDIO DEL AVANCE DE LA INVESTIGACIÓN EN SU CONTRA POR PRESUNTO COBRO DE COIMAS.
Potocar presentó su dimisión luego de que ayer la Cámara del Crimen porteña rechazara su pedido de excarcelación en el marco de la causa en la que está acusado de ser el jefe de una asociación ilícita destinada al cobro de dinero a comerciantes de Saavedra y Nuñez a cambio de protección.
El Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires confirmó oficialmente la salida de Potocar, quien había sido suspendido del cargo en abril pasado, luego de que estallara el escándalo y poco antes de que se ordenara su detención.
De esta forma, la conducción de la Policía de la Ciudad continuará bajo la responsabilidad de la Secretaría de Seguridad, a cargo de Marcelo D'Alessandro, según se informó oficialmente.
Ayer, la Sala VII de la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional, con los votos de los jueces Mariano Scotto y Mauro Divito, rechazó el pedido de liberación de Potocar, quien la semana pasada había sido procesado por el juez de instrucción Ricardo Farías.
El magistrado le había trabado además un embargo sobre sus bienes de 450 mil dólares, en el marco de la causa en la que figura como presunto "jefe" de una asociación ilícita destinada a recaudar mensualmente dinero de comerciantes y "trapitos".
Si bien la Cámara aún tiene pendiente evaluar si confirma su procesamiento, por el momento le denegó el pedido de libertad que formuló la defensa, por lo que Potocar finalmente presentó la renuncia al cargo.
Al rechazar el pedido del ahora ex jefe policial, los jueces Scotto y Divito consideraron que por las características de los sucesos, el cargo que ostentaba Potocar al momento de los hechos y "la gravedad de la imputación formulada", podría haber peligro de elusión de la Justicia. Agregaron, además, que por las funciones asignadas a su cargo, Potocar cuenta con medios para entorpecer el curso de la investigación.
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