EL DIPUTADO DIJO QUE LA DECISIÓN DEL JUEZ DE INTERVENIR LOS SAUCES ES "UNA OPERACIÓN DEL GOBIERNO" PORQUE MACRI NECESITA "TAPAR" LAS REVELACIONES SOBRE SUS VÍNCULOS CON EMPRESAS OFFSHORE Y EL IMPACTO DE SUS POLÍTICAS ECONÓMICAS.
"Bonadio pasó de estar en la servilleta de Corach al Iphone 7 de Macri”, dijo Máximo Kirchner frente a la decisión del juez federal de intervenir la empresa hotelera Los Sauces y la sucesión de Néstor Kirchner. El diputado atribuyó esa medida a “una operación clara del Gobierno” con el propósito tapar las revelaciones de los vínculos de Macri y su familia con empresas offshore y también el impacto de las políticas económicas.
En su cruzada contra la familia Kirchner, el juez Bonadio dispuso antes de ayer la intervención de Los Sauces y también de la sucesión del ex presidente, para lo cual removió a su hijo Máximo como administrador de los bienes que conforman la herencia. A la reacción inicial del abogado de Cristina Kirchner, Carlos Beraldi, quien advirtió que “es una medida ilegal que se corresponde con una cadena de irregularidades que viene cometiendo este juez”, se sumó ayer la del diputado.
Tras remarcar los vínculos entre Bonadio y Macri, el líder de La Cámpora atribuyó la decisión del magistrado a “una operación del Gobierno, quizás molesto por lo que pasó con Ganancias o necesitado de tapar la situación que afecta a Macri y a su familia” a propósito de sus vínculos con empresas en paraísos fiscales. “En el tema de las offshore raspás cualquier Macri y sale o sale”, dijo Máximo en declaraciones a radio del Plata.
El diputado recordó que “es histórica la relación de Macri amoldando conductas económicas a cualquier artículo del Código Penal” y agregó que “habrá que ver la sociedad cuánta paciencia tiene”. Señaló en ese punto la alianza que hoy tiene el ex hijastro de Flavia Palmiero con los grandes medios de comunicación, pero anticipó que “estas tapas de Clarín van a estar hasta que se resuelva bien la cuestión del 4G de Nextel y algunas cuestiones más y después empezará a haber otras situaciones. Clarín se maneja así”.
Máximo alertó también que las causas judiciales contra su familia están relacionadas “con la venganza” y apuntan a “corrernos del eje, que es que a la sociedad argentina le prometieron una revolución de la alegría y estamos en una situación particular. Pasamos del Indio Solari y los fundamentalistas del aire acondicionado al Niño Macri y los desestabilizadores del aire acondicionado”. Además de cuestionar al hijo bobo de Franco Macri por haber denostado la venta de acondicionadores de aire durante el anterior gobierno, el diputado consideró “llamativo” que digan que no prometieron eliminar Ganancias “sin que se les mueva un pelo”.
Sobre el año próximo, su análisis fue que “va a estar muy imbuido de la cuestión económica” y vaticinó que “de insistir el Gobierno a como dé manera con trabar la modificación de Ganancias que salió de la Cámara de Diputados a la economía le va a costar mucho arrancar”. En tal sentido, añadió que "si la gente pierde su trabajo o el poder adquisitivo, la economía entra cada vez en un estado de mayor recesión”.
“Quizás estamos en el comienzo de un debate interesante en el seno del movimiento nacional y popular teniendo en cuenta que hubo sectores más proclives a acompañar ciertas políticas como blanqueo o reparación histórica”, dijo sobre la discusión que se planteará de cara a las elecciones del 2017. “Nosotros no coincidíamos y finalmente teníamos razón”, remarcó, para luego señalar que ahora “hay mayor grado de conciencia sobre estas políticas neoliberales y sobre el impacto que están teniendo en los sectores populares y medios”.
El legislador, sostuvo también que “lo que pasó con Ganancias es un ejemplo de que se puede trabajar bien y hacerlo desde las diferencias”.
“A Sergio lo conozco de hace años”, respondió ante la consulta de si es posible coincidir con Massa, pero planteó “que, como dijo Cristina, para nosotros la unidad para por cinco o seis puntos inamovibles, como una política de desendeudamiento, una política de derechos humanos como la que se mantuvo durante años”.
“Habrá que ver de garantizar a la mayoría de los argentinos una calidad de vida superior y no inferior a la que tenían el 9 de diciembre”, declaró y de su padre remarcó que Néstor “Kirchner nos dejó mucho mejor parados que de rodillas y con la cabeza en alto”.
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