AL GENERARSE UN RECHAZO GENERALIZADO POR LA AUSENCIA DEL PROCESADO MANDATARIO Y LA POLÉMICA ONG DE CAMBIEMOS, MUGRIZIO MACRI TUVO QUE SUSPENDER SUS VACACIONES EN LA PATAGONIA Y VIAJARÁ HOY A CONCORDIA, ENTRE RÍOS, UNA DE LAS ZONAS MÁS AFECTADAS POR LAS INUNDACIONES.
Ya es sabido que la línea de Duran Barba es pragmática, cuando los "focus groups" permanentes que realizan le indican un descontento, deshacen lo que fuera para volver a contentar a la opinión pública.
Tal es el caso del malestar que genero en gran parte de la población que el procesado presidente Mugrizio Macri descanse en la Patagonia a sólo 2 semanas de haber asumido, mientras el Litoral sufre una de las peores inundaciones de su historia.
Para colmo, quedó al mando la vicepresidenta, Gabriela Michettti, que en lugar de poner el Estado a disposición de los damnificados, pidió por Twitter donaciones para su ONG, la Fundación Sumar, la cual comparte con gran parte de los funcionarios del gobierno (ver nota aparte en esta misma edición).
A esto se le suma que desde la militancia kirchnerista de Unidos y Organizados, como lo hicieron a partir de las inundaciones de La Plata en 2013, se pusieron a disposición de los afectados para paliar la mala situación (ver nota aparte en esta misma edición).
A su vez, Dilma Rousseff sobrevoló las zonas perjudicadas por la misma inclemencia en su país, y tomo la rápida resolución de disponer 1.8 millones de dólares para solucionarle el problema a los 8.000 evacuados.
Cada vez había más pruebas de la inoperancia y desinterés del Gobierno de derecha, por lo que Macri deberá hacer el esfuerzo, al menos mediático, de parecer interesado y seguramente será mostrado como un gran líder por los monopolios mediáticos.
Desde Clarín, uno de los órganos oficiales de prensa, adelantaron que fuentes del gobierno le confirmaron que Macri viajará directo desde la localidad de Neuquén hacia Entre Ríos y luego volverá a la Patagonia, donde seguirá descansando, obvio.
Recién hace una hora emitió una serie de tuits en los que aseguró que "La ayuda social para las zonas inundadas ya está en camino. Estamos trabajando en equipo con los municipios y las provincias", palabras repetidas hasta el hartazgo según reza el manual comunicacional escrito por Durán.
Más allá de las miserias de los gobernantes, hay que poner el foco en solucionar el problema de los verdaderamente afectados, que no son los que perdieron las silobolsas con las que vienen especulando hace meses, sino las miles de familias que se quedaron con poco o sin nada.
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