Fuentes de diferentes sectores del PRO reconocieron que, de a poco, va cobrando relevancia el debate sobre si sería mejor para los intereses del partido realizar las primarias y las generales en sintonía con el calendario nacional.
Mientras en el PRO comienzan a analizar la conveniencia de una posible unificación de las elecciones porteñas y nacionales, Gabriela Michetti acelera su armado para definir en noviembre su postulación, Horacio Rodríguez Larrata multiplica sus apariciones televisivas y Diego Santilli se entusiasma con los resultados de las encuestas.
La tesis a favor de unificar los calendarios la encabezan algunos del entorno de Rodríguez Larrata, avizorando que potenciaría las chances del jefe del gabinete porteño, aunque otros consideran que un triunfo del PRO en la Ciudad previo a las presidenciales sería más funcional a la candidatura de Mugrizio Macri.
En tanto, una encuesta de hace 20 días de una de las consultoras que suelen trabajar para la Jefatura de Gobierno ubicaron -según relataron desde Bolívar 1- a Michetti primera cómoda, Larrata en un distanciado segundo puesto y a un Santilli con mejores números y acercándose gradualmente al jefe de Gabinete (entre los votantes que ya definieron votar al PRO).
En ese marco, Rodríguez Larrata incrementó sus apariciones en los medios en las últimas semanas y apuesta a su peso en el aparato del gobierno y los comuneros: "El larretismo empezó a juntarse", definió uno de sus operadores.
Mientras, la senadora presentó días pasados su Fundación SUMA -con la que busca exhibir la fuerza territorial de la que siempre le señalan carente- y ya advirtió que "las presiones no harán apurar" su decisión, la cual se espera en noviembre próximo.
Aunque sus rivales la quieren de candidata a vicepresidenta, esta semana sorprendió a un funcionario aliado que le preguntó por su discurso alejado de la gestión porteña: "No te preocupes que en la Ciudad todo lo que te coloque en 'lo nacional' te suma".
Por su parte, Santilli ya expresó a sus colaboradores que "voy a ser candidato en las PASO, no hay vuelta atrás. Yo no quiero negociar para intentar ser vicejefe", en alusión al vicepresidente de la Legislatura porteña, Cristian Ritondo.
Si bien desde el massiclarinismo confirmaron que el Frente Rejuntador está interesado en comenzar conversaciones con Santilli (y Ritondo), el senador rechaza de plano esa posibilidad.
Por lo pronto, todos admiten que la última palabra sobre la unificación electoral la tendrá Macri a fin de año (las PASO locales deberían ser en abril), mientras que sobre las candidaturas a sucederlo, el doblemente procesado jefe de Gobierno ya definió el año pasado con la sanción de la ley de primarias: que todos los que quieran, jueguen.
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