La Metropolinazi se enfrentó ayer a la mañana a los vendedores ambulantes de la calle Avellaneda tras la queja de comerciantes por la venta ilegal. Los locales de la zona cerraron ante los disturbios.
La Policía Metropolinazi desalojó ayer a la mañana a los vendedores ambulantes de la avenida Avellaneda, en el barrio de Floresta, y se produjeron enfrentamientos que terminaron con algunos heridos de bala de goma. Los comerciantes de la zona bajaron las persianas de sus locales.
Los incidentes se produjeron cerca de las once cuando efectivos de la policía porteña se dispusieron a echar a los manteros que exponen su mercadería en las veredas de la avenida Avellaneda y Emilio Lamarca.
A la resistencia de los vendedores, los efectivos respondieron con balas de goma e hirieron a algunas personas, que luego fueron asistidas por el SAME.
Los manteros denunciaron que hubo casos en que la policía les sacó sus productos y no se los devolvió . No obstante, pasado el mediodía, muchos regresaron a vender a la vereda.
Hace meses que los comerciantes de la avenida Avellaneda protestan contra la venta de los manteros. Junto a la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y la Federación de Comercio de Industria de Buenos Aires (Fecoba) protagonizaron varios cortes de calle en lo que va del año para pedirle al Gobierno de la Ciudad que aplicara medidas al respecto.
Según datos de la CAME, la zona en cuestión concentra más de 500 puestos ilegales, que acumularon ventas por 241,4 millones de pesos en los primeros nueve meses del año.
"Que las autoridades entiendan que el comercio no cae, el comercio va a pelear. Este es un método pacífico de lucha por los derechos y no solo de los comerciantes, porque los puestos ilegales también le quitan trabajo a los empleados", enfatizó el presidente de CAME, Osvaldo Cornide, durante una de las manifestaciones.
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