domingo, 31 de marzo de 2013

El FAP y el radicalismo enfrentan su propia encrucijada política

La fuerza que lidera Hermes Binner y la UCR barajan alternativas y disputan los candidatos. Desconfianza y cruces en ambos sectores.
 
El cronograma de elecciones Primarias y comicios legislativos en todo el país está cada día más cerca, pero cruzado por las jugadas electorales de la provincia de Buenos Aires.
 
El debate de la oposición por cerrar ofertas electorales con chances en el primer distrito electoral del país también involucra al radicalismo –actor central de una fallida alianza entre el radical Alfonsinito y Francisco de Narcováez en 2011– y el Frente Amplio y Progresista (FAP) que lidera, a nivel nacional, el socialista santafesino Hermes Binner.
 
Si el gobernador Daniel Scioli y el intendente de Tigre, Sergio Massa, se mantienen alineados con el kirchnerismo, mientras el PJ Federal y el PRO consuman su matrimonio, habrá una compleja encrucijada para ambas fuerzas.
 
"Algunos en el FAP piensan que un acuerdo con la UCR los puede desdibujar. Pero creo que si no hay alianza en la provincia podemos quedar desdibujados los dos", confió Miguel Bazze. El diputado nacional y titular de la UCR bonaerense también mostró su optimismo por la definición distrital luego de la Convención radical de Olavarría que abre las puertas a un pacto con la fuerza que encabeza Binner.
 
Pero las cosas no parecen tan simples: dos de las cuatro fuerzas que componen al FAP se oponen a cualquier tipo de acercamiento con el centenario partido. Se trata de Unidad Popular, liderada por Víctor de Gennaro junto a Claudio Lozano, y el GEN que encabeza Margarita Stolbizer.
 
"No hay una resolución tomada sobre el tema y las posiciones están divididas. A fines de abril seguramente decidiremos qué hacemos", dijo Horacio Alcuaz, uno de los referentes del GEN, en diálogo con este diario. El tiempo apremia, ante una polarización cada vez más segura en el principal territorio electoral.
 
Todavía no está claro el papel que tendrá Gustavo Posse en ese armado. Muchos dudan de que deje su cómoda y visible poltrona sanisidrense a cambio de uno de los 257 anónimos escaños que puede ofrecerle la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires. Ese dato, deslizan en Bolívar 1, podría sumar a Posse dentro de la ola testimonial, es decir como uno de los candidatos que pondría su nombre en la boleta para luego bajarse y dejar al segundo en la lista.
 
Tampoco se sabe cómo será la división de bienes con la UCR. "No sé si toda la gente que está con Posse adentro va a cruzar con él de vereda. Posse no tiene un gran desarrollo en el interior del partido, su fuerza está en San Isidro y tiene algo de llegada en Escobar y San Martín. Pero no más que eso", reflexionó Bazze, en su condición de hombre fuerte del radicalismo en el distrito bonaerense.
 
El legislador se animó a dudar sobre las consecuencias reales dentro de la UCR ante el pase de Posse al PRO. "Su baja no pone en crisis al partido, hay mucho mediático en esto. Son los medios que quieren instalar a Macri como presidenciable y los que ponen a la llegada de Posse como un gran triunfo", sostuvo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario