LA INTEGRANTE DEL CONSEJO DE LA MAGISTRATURA GABRIELA VÁZQUEZ CUESTIONÓ LA SUSPENSIÓN Y LA APERTURA DE UN JUICIO POLÍTICO CONTRA EL CAMARISTA FEDERAL EDUARDO FREILER POR CONSIDERAR QUE SE PRODUJO "DE UNA MANERA MUY IMPROPIA, INADECUADA, A LOS APURONES", EN LO QUE CALIFICÓ COMO "UN ATROPELLO NUNCA VISTO".
"De una manera muy impropia, inadecuada, a los apurones se trató de sacar el apoyo al dictamen acusatorio", sostuvo la representante de los magistrados en el órgano.
En declaraciones radiales, la juez de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo consideró que "un mecanismo irregular" para desplazar a Freiler coloca a su par "en las mejores condiciones para solicitar la nulidad de todo lo que se decidió en ese plenario".
Al respecto, Vázquez se quejó de que la Corte Suprema de Justicia no le haya tomado juramento al senador nacional Mario Pais, quien por ello no pudo asistir a la sesión en la que se trató el caso del ahora suspendido magistrado.
En ese sentido, cuestionó a sus pares Luis María Cabral y Leónidas Moldes, quienes votaron contra Freiler, al señalar que "me parece triste, porque ellos saben perfectamente bien que el Consejo de la Magistratura no estaba legalmente constituido el jueves como lo establece la Ley 24.937. Faltaba la representación popular, del Senado en este caso, porque no se le tomaba juramento a Pais".
Vázquez también repudió que se "haya alterado el orden del día y el punto estaba muy abajo", así como precisó que "había 37 audiencias públicas de concursantes, a quienes hicieron ir a sus casas".
"Esto es un mensaje muy desagradable a la independencia del Poder Judicial y a la tranquilidad de espíritu que tenemos que tener cuando dictamos la sentencia. Cada vez que digamos algo que no le guste al poder de turno estamos al albur de estas trapisondas", añadió la jueza. "Hay un atropello que nunca he visto, porque cuenta con el apoyo de los propios jueces en el Consejo", concluyó.
Cabe recordar que el jueves, sin la presencia de uno de los representantes de la oposición, el Consejo de la Magistratura suspendió en su cargo y aprobó la apertura de un juicio político contra el camarista federal por presunto mal desempeño en sus funciones. El oficialismo logró así el objetivo por el que venía pugnando, luego de que el senador del Frente para la Victoria Ruperto Godoy quedó impedido de integrar el Consejo, por una decisión judicial.
Con el voto de ocho de sus integrantes y sin que se hubiera reemplazado a Godoy con otro senador la oposición, el organismo decidió que el miembro de la Sala I de la Cámara Federal, que revisa muchas de las causas por casos de corrupción sea sometido a un jurado de enjuiciamiento que determinará finalmente si es o no destituido de su cargo.
Mugrizio Macri celebro la maniobra bochornosa y afirmó que la decisión "es un paso adelante enorme hacia la Argentina de la seriedad, hacia el fin de la impunidad".
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