LA EX PRESIDENTA PARTICIPÓ DE UN HOMENAJE EN SAN TELMO JUNTO A VÍCTIMAS DE LAS COLECTIVIDADES ÁRABE Y JUDÍA DURANTE LA ÚLTIMA DICTADURA.
La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner participó ayer del homenaje a los detenidos desaparecidos de las colectividades árabe y judía durante la última dictadura cívico militar, que sirvió además para la presentación en sociedad de "Convivencia Alef-La Hermandad de los Pueblos", organización en la que confluyen el Llamamiento Argentino Judío y el observatorio "El ojo Moro".
Del encuentro, llevado a cabo en el Centro Cultural Caras y Caretas, participaron, entre otros, Mustafá Alí, Miguel Ángel Estrella y el ex canciller, Héctor Timerman. Jorge Elbaun, integrante del Llamamiento, quien precedió en la palabra a Cristina, afirmó que “ni la Daia ni la Amia representan a la colectividad judía” y advirtió que los organizadores de la convocatoria habían decidido homenajear a las víctimas de origen judío y árabe porque “representan un ejemplo de multiculturalismo”. Asimismo, rechazó cualquier intento negacionista y recordó a las 2000 víctimas de la represión de origen judío.
Cristina, por su parte, presentada como militante del campo nacional y popular, reivindicó las políticas de derechos humanos implementadas durante sus gestiones y la de su predecesor, Néstor Kirchner, quien con apenas el 22 por ciento de los votos incorporó al escenario internacional el debate sobre los derechos humanos, a pesar de que los derechos humanos no figuraban en ninguna encuesta.
Más adelante, rechazó la teoría que sostiene que la guerra en Oriente Medio responde a razones étnicas o religiosas, y sostuvo que solo responde a “intereses económicos y geopolíticos, que estamos obligados a mantener fuera de nuestras fronteras como país y como región”.
“Que nadie venga a importar conflictos que no nos pertenecen”, reclamó. “Que nadie nos etiquete (…) en esta nueva etapa colonizadora , que quiere instalar la cultura de neoliberealismo”, insistió.
“Que nadie venga a importar conflictos que no nos pertenecen”, reclamó. “Que nadie nos etiquete (…) en esta nueva etapa colonizadora , que quiere instalar la cultura de neoliberealismo”, insistió.
En otro orden de cosas, la ex jefa de Estado remarcó que "habla muy mal del sistema judicial" argentino que "hace más de 22 años del atentado a la AMIA" no se sepa "la verdad" sobre los responsables.
"Hace más de 22 años y medio del atentado, 13 años desde que declaré en el primer juicio oral, todavía no podemos conocer la verdad. Habla muy mal de nuestro sistema judicial y de las instituciones en la Argentina", indicó.
Por último, denunció que en la Argentina ya no se respetan las decisiones de los organismos internacionales, como la ONU o la OEA, y que “la prisión de Milagro Sala es una afrenta al prestigio que el país había ganado en el concierto internacional”.
“Si esta era la manera de insertarnos en el mundo, estamos mostrando las peores taras de una sociedad: el desprecio a esa América mestiza de la cual Milagro es una representante”, concluyó Cristina.
“Si esta era la manera de insertarnos en el mundo, estamos mostrando las peores taras de una sociedad: el desprecio a esa América mestiza de la cual Milagro es una representante”, concluyó Cristina.
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