MIENTRAS CAE EN LAS ENCUESTAS LA IMAGEN POSITIVA DEL EX HIJASTRO DE FLAVIA PALMIERO, EMPIEZAN A CRECER LOS MICROACTOS CONTRA EL LÍDER DEL PRO. QUÉ HACE PARA EVITARLOS.
El lunes, mientras Mugrizio Macri inauguraba el nuevo tramo electrificado de la Línea Roca de trenes, en la estación de la localidad bonaerense de Berazategui, un grupo de personas llevó adelante un escrache con carteles que repudian el tarifazo. "Berazategui no es Panamá", aseguraban.
Sin embargo, esta no sería la primera vez que escrachan al pelotudo. Mientras su imagen cae cada vez más en las encuestas, los microactos contra él crecen.
Llegar a Berazategui antes de ayer no le resultó nada fácil. En primer lugar, el hijo de puta prohibió a Juan José Mussi, diputado, ex intendente y padre del actual jefe comunal, que espere en el andén la llegada del tren que había tomado en Ezpeleta y militantes del PRO Berazategui se movilizaron para bloquear una marchade La Cámpora.
El PRO ya sabía que tenía que tratar con cautela a la localidad y que distintas zonas están en contra de su llegada. Tan sólo 20 días atrás, el ex hijastro de Flavia Palmiero suspendió una visita a una cooperativa en Wilde porque hubo amenazas y alertas sobre incidentes.
El régimen macrifascista está repleto de alertas de posibles movilizaciones en el Gran Buenos Aires y, por ello, tomó medidas. Por ejemplo, el microacto presidencial en Berazategui se confirmó el viernes, 72 horas antes pero desde la cúpula presidencial le dieron a Mussi la indicación precisa de no difundir ni promocionarla actividad hasta el mismo lunes por la mañana.
Hace poco tiempo, mientras anunciaba su veto a la ley antidespidos en Cresta Roja, hubo quejas, bombos y gritos fuera de la planta. En Córdoba, en abril, también fue increpado por una manifestante que logró eludir el cordón policial y lo empujó. Pedía por obras en un pueblo inundado.
Además, en el mismo mes, Macri compartió un acto con Florencio Randazzo y, mientras saludaba desde arriba del tren y sus allegados filmaban, tuvo que ver pasar una bandera que decía "Macri=hambre" y una que rezaba "no fue magia".
Por otra parte, tras anunciar las medidas sociales para hacerle frente a la crisis económica en el centro de jubilados Deshojando Margaritas, el infeliz fue increpado por una jubilada que cuestionó la reducción de medicamentos en PAMI. Como si esto fuera poco, en medio de los actos, cuando nadie lo detiene, lo cuestiona o lo increpa, se le caen banderas en la cabeza.
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