El mafioso Poder Judicial atacó a horas de finalizada la movilización opositora del 18F con una batería de medidas contra el Gobierno. Las claves del golpe judicial el día posterior a la marcha.
A horas de finalizada la marcha opositora convocada por un sector opositor del Poder Judicial, los jueces atacaron al Gobierno con una batería de medidas.
Las malas noticias para el Gobierno Nacional llegaron un día después del promocionado 18F, con la confirmación del procesamiento a Amado Boudou. El golpe de más impacto mediático fue el de la Cámara Federal, que decidió el jueves sobre la causa Ciccone. Entre quienes tomaron esta decisión se encuentran los integrantes de la Sala I de la CF, Eduardo Farah, Eduardo Freiler y Jorge Ballestero, que respaldaron la inicitativa del juez federal Ariel Lijo de señalar al ex ministro de Economía como autor de los delitos de cohecho pasivo y negociaciones incompatibles con la función pública.
Al mismo tiempo, el jueves por la tarde, esa sala rechazó la recusación del juez Claudio Bonadio en el caso Hotesur. Y además, el juez federal Luis Rodríguez citó a indagatoria a la procuradora del Tesoro, Angelina Abbona, por no adoptar medidas contra el grupo Marsans, que administró de manera fraudulenta Aerolíneas Argentinas. Abbona hace días presentó el escrito con los argumentos oficiales para refutar la denuncia de Alberto Nisman que ahora analiza el juez Daniel Rafecas.
El fallo del jueves sobre Boudou estaba en la agenda judicial desde fines de 2014. "En él, los camaristas respaldan y refuerzan la hipótesis del titular del Juzgado Federal Nº 4, en donde se instruyó la causa", evaluó Eduardo Durañona, el abogado que se hizo cargo de la estrategia defensiva de Boudou en la causa. “No consideraron nuestros argumentos para nada, sino que reafirmaron los argumentos del juez de Instrucción. No compartimos en nada ambas decisiones”, expresó el letrado.
Los camaristas desestimaron los argumentos con los que Boudou apeló el procesamiento. Freiler, Farah y Ballestero consideraron fundamentada la acusación por cohecho al vicepresidente. Los camaristas respaldan la participación del vicepresidente en al menos dos de las seis reuniones que asegura existieron entre los Ciccone, Núñez Carmona y Vanderbroele por el traspaso accionario de la imprenta a The Old Fund.
“No sucedieron esas reuniones en la presencia de Boudou, siempre lo dijimos”, remarcó Durañona, que se mostró sorprendido de las menciones que el fallo de Cámara realizó respecto de algunos testimonios tomados durante la investigación. “Nosotros estuvimos presentes en testimoniales en los que nunca ocurrieron dichos que la Cámara cita”, advirtió el abogado que evaluará durante el fin de semana los pasos a seguir. El vicepresidente sostuvo al apelar su procesamiento que no tuvo ninguna injerencia en el levantamiento de la quiebra de la empresa.
En el fallo de ayer, la Sala I también confirmó el procesamiento de Boudou como autor de negociaciones incompatibles con la función pública. Los camaristas consideraron probada la relación entre Boudou y Vanderbroele. Durante todo el proceso, el vicepresidente negó conocer a Vanderbroele.
A esta decisión judicial, el vicepresidente debe sumar la otra causa en la que está procesado, en este caso por irregularidades en los papeles de un auto comprado por Boudou en 1993. El miércoles, la Sala II de la Cámara rechazó su recurso de Casación para apelar su procesamiento.
En medio de este pantano que el Poder Judicial le plantea al oficialismo, la oposición busca sacarle rédito y ya el jueves mismo varios referentes anunciaron que insistirán con el pedido de juicio político al vicepresidente.
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